P. URTAZA
BALONMANO

Bera Bera se reinventa para seguir compitiendo por todos los títulos

Zuazo hace una fuerte apuesta para meterse en la pelea por una plaza europea con la llegada de Steinbach, Castellanos y Nogales.

Bera Bera, Zuazo y Zarautz serán los representantes vascos en la División de Honor 2015-16 que arranca hoy. La última vez que hubo más de un club guipuzcoano en la máxima categoría fue en la temporada 1996-97, en la que además del club de Bidebieta (entonces Corteblanco) estaban el Arrate Amaña (entrenado por Jorge Dueñas) y el Hernani.

Las donostiarras acabaron la Liga en cuarta posición, el Arrate Amaña fue quinto logrando plaza para una competición europea –gracias a que el entonces todopoderoso Mar Osito ganaba la Copa de Europa, con Montse Puche como central– aunque no pudo disfrutar de la experiencia, porque el equipo eibarrés se retiró en verano por causas económicas; y el Hernani fue penúltimo y descendió. Desde entonces el club donostiarra ha sido el único representante guipuzcoano en División de Honor.

Pero esta temporada le acompañará el Zarautz, que ya pasó fugazmente por la División de Honor en la temporada 1983-84, con un equipo en el que ya despuntaba Karmele Makazaga, que luego tendría una exitosa trayectoria en Hernani y Bidebieta, así como en la selección española, en la que jugó 130 partidos y llegó a disputar los Juegos Olímpicos de Barcelona'92.

Casi tres décadas después, su hija Nahia Arruti pelea por hacerse un hueco en la plantilla que debutará hoy en Bidebieta –aunque empezará la temporada en el segundo equipo–, claro ejemplo de la filosofía de un club volcado con su cantera, que afrontará su regreso a la elite con un grupo formado casi exclusivamente por jugadoras de Zarautz, completado por otras tres jugadoras guipuzcoanas de Elgoibar, Andoain y Eibar.

La Liga se pone en marcha con tres favoritos en las quinielas: Bera Bera, Rocasa y At. Guardés. Otros tres o cuatro clubes parten dispuestos a pelear por la cuarta plaza, la última que clasifica para una competición europea (con la desaparición de la Recopa a partir de la temporada 2016-17, la División de Honor pierde una plaza, de 5 a 4), entre quienes tratará de estar Zuazo, junto al Aula Cultural –que pese a perder a Alicia Fernández ha hecho tres fichajes muy buenos, con Arderius, Prieto y Macías–; Alcobendas –que ha perdido jugadoras importantes, pero recupera a la veteranísima Ciobanu para la portería, y se ha reconstruído con la central Boada, la argentina Gandulfo y la pivote Silvia Ausàs, que jugará junto a su hermana Mónica–; y quizá Porriño, tras recuperar a sus extremos lesionadas Costas y Pérez, reforzarlas con Sara Gil, y fichar a la lateral zurda Prieto.

Valencia, Granollers y Málaga parecen haber mejorado sus plantillas, aunque habrá que esperar unas jornadas para comprobar cómo funcionan. Y donde se centrará el otro foco de atención es en la pelea por la permanencia en la que, además del Zarautz, deberían estar el otro recién ascendido, Oviedo, junto al Cleba León y, quizá, un Elche que ha perdido potencial.

De los tres favoritos solo el Rocasa mantiene un bloque casi idéntico al que ha sido subcampeón de casi todo en las últimas temporadas, salvo la Copa 2015, que ganó en la prórroga a Bera Bera. Las canarias han perdido a su pivote Haridian Rodríguez, que reforzará al At. Guardés, y para sustituirla ha llegado la internacional dominicana Yacaira Tejeda, desde el Adesal Córdoba.

Tres clubes en busca del título

Bera Bera, con cuatro bajas y tres incorporaciones, necesitará volver a reinventarse para seguir aspirando a todo. De la plantilla que fue subcampeona en 2011-12 detrás de Itxako –ese verano se desmantelaría el club de Lizarra– solo quedan tres jugadoras (Matxalen Ziarsolo, Eli Pinedo y Alba Menéndez). Desde entonces han pasado por el equipo 35 en cinco temporadas, además con varios cambios en el banquillo, y destacan los fichajes de varias de ellas por clubes de otras Ligas (primero Bea Fernández, Punko o Carvalho, luego Zoqbi, más tarde Castro, y las últimas Elorza y Núñez).

Bera Bera se ha ido adaptando a las circunstancias para seguir siendo competitivas. La fórmula defensa-contraataque ha sido su principal recurso para sumar 8 de los 9 títulos de las tres últimos años, pero la marcha de sus dos centrales defensivas a la Liga francesa, y la apuesta por dos jugadoras más ofensivas como Alicia Fernández y Tania Yáñez, alimentaban las dudas sobre el rendimiento de esta temporada, sobre todo cuando la diferencia entre las tres mejores plantillas es mínima, casi ya inexistente.

Por eso la victoria en la Supercopa, además de significar un título más, se celebró a lo grande, porque significaba que el equipo sigue siendo capaz de mantener su intensidad defensiva, con una Judith Sans sobresaliente en su primera cita oficial –MVP del partido–, bien acompañada por Ana Martínez, que formarán el nuevo eje central de la defensa. El resto del equipo también dio un paso adelante para proteger su portería, y Ana Temprano, consciente de que esta temporada su labor podría ser aún más decisiva que en las anteriores, ha llegado a la competición más fina y centrada que nunca.

El tercer aspirante, el At. Guardés, ha vuelto a tirar de talonario para seguir construyendo un equipo campeón, como declara sin rodeos su nuevo presidente. El club gallego, en tres años en la categoría, fue 5º en la 2012-13, 4º en la 2013-14 y 3º en la última Liga. El año pasado inició su remodelación, firmó un acuerdo por dos temporadas con el club angoleño Primeiro de Agosto (campeón de su país y de Africa) para la cesión de cuatro de sus mejores jugadoras –para que se curtieran en Europa–, y fichaba a dos internacionales como Egozkue (procedente de la Bundesliga) y Benzal (de Hungría); junto a Inés Hernández (Adesal).

Esta temporada ha aumentado su apuesta fichando a la portera Carrera (Alcobendas), las zurdas Manaut (Castelldefels) y Tornero (La Rioja), y las pivotes Rodríguez (Rocasa) y Paula García (ex de Alcobendas, que jugó en Francia la pasada temporada). A la espera de conocer a las jugadoras que le cederá este año el Primeiro de Agosto –los compromisos del club angoleño y de su selección podrían demorar su llegada hasta octubre–, el At. Guardés ya tiene una plantilla capaz de luchar por el título.

En la pelea por la permanencia el Aiala Zarautz lo tendrá difícil, y necesitará de todos sus recursos para afrontar el reto. La experiencia y el conocimiento de los rivales de Martín Larrañaga, tras dos temporadas como segundo entrenador de Bera Bera, será importante. Pero aún más la ilusión y el espíritu de lucha de sus jugadoras, que les ha conducido hasta la elite. La caliente afición del Aritzbatalde también tendrá que apoyar desde las gradas para impedir que su equipo flaquee, sobre todo en un inicio de Liga complicado, y empujarle frente a rivales a los que puede vencer si consigue conjugar entusiasmo y acierto.

Zuazo pretende subir de nivel

Zuazo ha remodelado su plantilla con la salida de varias jugadoras de larga trayectoria en el club, como Ahedo, Bonilla, Alvarez, Yáñez o Etxabe, y ha logrado reunir un buen grupo con mezcla de veteranía y juventud, que parte con el objetivo de mejorar la octava plaza en que ha terminado las tres últimas Ligas.

La llegada de la internacional alemana Steinbach le convierte en un rival capaz de batir a cualquiera, dotándole de una capacidad de lanzamiento desde nueve metros de la que no dispone ningún otro equipo. Además ha reforzado su portería con Castellanos, una de las jugadoras que emigró en su día y ha jugado tres años en Francia, donde ha adquirido madurez. Es una portera de gran envergadura, que cubre el hueco de la internacional junior Lorena Ramírez, que fichaba por Granollers.

También ha llegado la central Nogales –ya son 6 las jugadoras que hace dos años jugaban en Kukullaga y que, tras su descenso, han ido fichando por el club de Barakaldo–, y dos zurdas, Berastain y Mujika, que repartirán minutos en el extremo derecho.