El Opus de manifa; cosas veredes, amigo Sancho
Cosas veredes, amigo Sancho», se supone que dijo el Quijote, aunque, según los expertos, tal cita no aparece en la obra cervantina. El caso es que esta vez sí, que el ingenioso hidalgo puede estar viendo realmente gigantes y no molinos de viento. Porque no se puede evitar alucinar al observar al grupo de personas concentradas que aparecen detrás de una pancarta en la que se puede leer «Bueno para Navarra. Ona Nafarroarentzat». Nada de ropa de montaña o de esas rastas que tanto inquietan a Celia Villalobos. Muy al contrario, los que aparecen protestando lucen americana, faldas plisadas hasta la rodilla y melenitas cortas por encima de los hombros.
Son personas que tradicionalmente se han calificado como «gente de bien y de orden», poco dada a cuestionar el modo de proceder de los gobernantes. Pero esta vez resulta que son las que se han echado a la calle a quejarse, al estilo de perro-flautas sin oficio ni beneficio a los que aplicar la antigua Ley de Vagabundos y Maleantes.
Quién nos iba a decir que veríamos a las gentes del Opus manifestándose contra el Gobierno de Nafarroa. Esto sí que es el mundo al revés. O es que tal vez nunca les ha tocado defender lo que consideran suyo, porque los suyos ya estaban arriba para defenderlo, y ahora se han dado cuenta de que eso de manifestarse no es ningún capricho cuando te sientes perjudicado.
Solo faltan unos antidisturbios cargando al grito de «Vamos darles un viaje, venga». Aunque esto último me parece que ya solo puede quedar para los acosados indar gorri y los libros de caballería.