Jon ORMAZABAL
MANOMANISTA

La zaga mantiene la lucha contra su «anacronismo»

David Merino entiende que deben jugar «no tan clásico, pero sin volvernos locos al buscar el aire».

Hace ya tiempo que las luchas individuales se han convertido en una especie de coto privado para los delanteros. En el Cuatro y Medio no hubo ningún zaguero y en la presente edición del Manomanista solo hay tres pelotaris que se desenvuelven en los cuadros largos –Rezusta, Merino II y Untoria–, después de que Mikel Beroiz y Jon Ander Albisu se quedaran en las previas de Asegarce ante Elezkano II e Iker Arretxe.

David Merino tampoco pudo superar su criba ante Iker Irribarria, otro delantero, pero la renuncia de José Javier Zabaleta a participar en el Manomanista llevó a los dirigentes de Aspe a repescar al de Villar de Torre.

A pesar de que la experiencia de Ordizia no fue demasiado positiva, el Manomanista es una modalidad que siempre le ha gustado al riojano. «Yo en aficionados jugaba mucho al mano a mano. Lo que pasa es que desde entonces a ahora ha cambiado la forma de jugar. Para mí es una oportunidad más, un campeonato nuevo y voy con ilusión, porque este año he podido prepararlo. Eso sí, sé que lo tengo muy difícil porque el mano a mano se ha complicado mucho para los zagueros, pero hay que intentarlo, sobre todo tratar de disfrutar en el frontón y a ver si podemos dar algún susto».

Buscar la fórmula

Tanto en su partido contra Irribarria como en el que Albisu disputó contra Iker Arretxe se vio a los zagueros cambiando su habitual forma de jugar, tratando de integrarse a la agresiva forma de jugar que impera ahora mismo. En una tertulia radiofónica en Ser Pamplona, Fernando Goñi no parecía demasiado convencido con esta mutación, pero parece evidente que algo deben cambiar si quieren tener éxito en la que históricamente ha sido la txapela más importante de la temporada manista.

David Merino seguirá intentándolo. «Ante Irribarria fallé más de la cuenta y fallando muchas pelotas no puedes ganar en el mano a mano, pero está claro que a darle, darle y darle ahora mismo es muy difícil ganar los partidos. Alguno podrás ganar de la forma tradicional pero hay que hacer cosas, intentar darle y acabar el tanto. Como dije en su día, no hay que jugar ni de manera tan tradicional ni volvernos locos e intentar entrar a todas, que es lo que nos pasa a los zagueros que vamos a buscar muchas veces el aire y nos precipitamos. Sobre todo hay que saber tomar las decisiones correctas y a ver si este año decido bien», apuntó.

Deberá hacerlo, porque se enfrenta a un Joseba Ezkurdia que el año pasado tuvo contra las cuerdas a un Oinatz Bengoetxea que apuntaba a campeón hasta su lesión. «Es verdad que ahora mismo por la forma de jugar, los delanteros tenemos ventaja ante los zagueros. Pero no me puedo relajar, si salgo confiado no tengo nada que hacer, David es un zaguero que juega muchísimo en el mano a mano», señaló el de Arbizu, que este año ha tenido tiempo para prepararse.

Zubieta e Ibai Zabala, recuperados

Todavía necesitarán un tiempo para regresar a las canchas, pero tanto Aitor Zubieta como Ibai Zabala están en la fase final de sus respectivos procesos de recuperación de sus sendas lesiones.

El zaguero navarro, que ya llevaba un tiempo haciendo manos en Etxarri, realizó el martes su primer entrenamiento con pelota dura en el Labrit iruindarra desde que abandonó el Parejas tras jugar en Arrasate. El pelotari de Aspe fue operado de su rodilla y el tendón de Aquiles el 5 de enero y la evolución ha sido positiva, por lo que ahora necesitará coger algo de ritmo antes de regresar a la competición. En ese entrenamiento le acompañó el joven Darío, que también lleva mucho tiempo sin jugar por problemas de manos.

Más cerca de reaparecer parece un Ibai Zabala que ya ha completado varias sesiones de frontón tras su paso por el quirófano el 11 de febrero para eliminar una fibrosis en la mano derecha que lo mantiene de baja desde el 16 de enero.J.O.