Mikel Landa superó ayer las mejores expectativas en la novena etapa del Giro, una crono de 40,5 kilómetros marcada por la lluvia que favoreció al alavés para perder solo siete segundos con respecto a Nibali y superar a Valverde y a los demás escaladores. Primoz Roglic, que salió con la carretera seca, logró la victoria de etapa y Brambilla mantuvo la maglia rosa beneficiado por dos caídas y un cambio de bicicleta de Ilnur Zakarin.

Se esperaban grandes diferencias en la crono y no las hubo. Y el gran beneficiado por ello fue Mikel Landa, que se encontró con un recorrido y un tiempo propicios para una crono tan larga y además se creció con las referencias que le daban.

En la primera el de Murgia apenas perdió 31 segundos con Amador, 16 con Dumoulin, trece con Zakarin, seis con Nibali y marcó el mismo tiempo que Valverde y aventajó al resto de corredores que disputan la general. En la segunda referencia Landa quedó a 40 segundos de Amador, a 15 de Dumoulin, a 10 de Zakarin, a 8 de Valverde y a 6 de Nibali y en la tercera referencia incluso se acercó a tres segundos del siciliano y le metía ya nueve al murciano.

En la meta el líder del Sky, a pesar de perder algunos segundos por no arriesgar en un final peligroso, culminaba su gran crono al quedar a 1:35 de Jungels, 1:01 de Amador, 22 segundos de Dumoulin, a solo siete de Nibali y sacar tiempo al resto de sus rivales. Aventajó en tres segundos a Kruijswijk, cuatro a Valverde, 36 a Majka, 1:19 a Pozzovivo, 1:28 a Chaves y 1:52 a Urán, la gran decepción de la jornada, que se cayó. Zakarin, tras dos caídas y un cambio de bicicleta en el tramo final, cedió 1:31 con el alavés, cuando en la primera referencia era el mejor escalador y maglia rosa virtual.

Roglic y Brambilla

El cambio en la meteorología obligó a los favoritos a tomar precauciones y favoreció a Primoz Roglic (Lotto NL). El esloveno se había quedado a unas centésimas de ganar la primera crono en Holanda y ayer se impuso en la segunda. Cancellara solo pudo ser cuarto y tras la etapa anunció su abandono para empezar a preparar el Tour. Kittel ni llegó a tomar la salida.

El otro ganador de la etapa fue Gianluca Brambilla, que veía perdida la maglia rosa en la primera referencia y consiguió, por el final cruzado de Ilnur Zakarin, mantenerla por un solo segundo con respecto a su compañero del Etixx Bob Jungels.

El luxemburgués y Andrey Amador han sido los que más tiempo han sacado en las dos cronos, pero de todos los favoritos, a pesar de las dudas que trasmitió en las primeras etapas, Landa ha salido muy fortalecido porque tras 50,5 kilómetros contra el crono apenas tiene en la general 25 segundos de desventaja con Nibali, 23 con Valverde y 20 con Dumoulin.

El Giro tendrá hoy su segunda jornada de descanso y mañana llega una etapa de montaña con dos subidas de Tercera de salida y el primer puerto duro, el Pian del Falco de Primera, a 16 kilómetros de la meta en Sestola (3ª) tras 219 de recorrido.

«La nueva bicicleta me dio confianza»

Mikel Landa destacó en la web del Sky tras la etapa las buenas sensaciones que tuvo con su nueva bicicleta, una Pinarello Bolide TT: «Ha sido un día muy agradable para nosotros. Me siento afortunado de tener una magnífica bicicleta nueva, lo cual me dio una motivación extra. Me concentré bien durante la etapa y creo que eso me llevó a un muy buen rendimiento de la bici, las ruedas... Eso me dio mucha confianza para estar seguro en un día con condiciones difíciles. A medida que avanzó la etapa me vi cada vez mejor».

El alavés añadió que «ahora debo recuperar en el día de descanso, tomarlo con calma y después podemos mirar hacia la próxima semana. Para nosotros es una parte muy importante de la carrera. La primera semana del Giro no ha sido fácil para nadie, pero el equipo siempre me ha apoyado y ahora es el momento para tratar de devolver su confianza en mí». Valverde y Nibali, por su parte, destacaron que no quisieron asumir riesgos por la peligrosidad que presentaba el recorrido con la carretera mojada.GARA