Sonrisas y lágrimas tras el pitido final
Leicester, Higuaín, Lewandowski, Ibrahimovic... son algunos de los nombres propios que nos deja una temporada más animada que de costumbre.
«No es importante saber por qué ganaste. Lo importante es saber por qué perdiste»
Ernst Happel, entrenador
El Sunderland sumó nada menos que 237 días en descenso, más que ningún otro equipo de la Premier League, y se salvó in extremis al sufrir una sola derrota en sus últimos once partidos, gracias también a los 15 goles del veterano Jermain Defoe, al que recuperó del Toronto de la MLS estadounidense. El triunfo de los ‘Gatos Negros’ en la penúltima fecha sobre el decepcionante Everton del destituido Roberto Martínez no solo les dio la salvación sino que de paso mandó al infierno de la Championship a su acérrimo enemigo, el Newcastle de Rafa Benítez, al que acompañan el histórico Aston Villa y el Norwich. Uno de los milagros que este deporte de masas nos regala sobre todo en las últimas jornadas, en esas en que pierde todo su valor aquello de que el fútbol es la cosa más importante de las menos importantes. Que se lo pregunten a la gran afición de un histórico como es el Sttutgart, campeón de la Bundesliga en 2007, y hoy, tras cuatro décadas en la elite, un club caido en el descenso, ese del que se salvó con un gol en los últimos minutos otro clásico, el Werder Bremen.
Tragedias deportivas de un final de temporada que también depara alegrías, las dos caras de la moneda, esa que el árbitro lanza al aire cada semana sin que nadie sepa de qué lado caerá. En la liga inglesa al Arsenal le salió cara. Sí. Los Gunners se auparon a la segunda posición en detrimento de un Tottenham que salió vapuleado el último día ante el descendido Newcastle, 5-1, en «el peor día de mi carrera como entrenador», confesó Mauricio Pochettino, que no obstante redondea una gran campaña e ilusiona para la próxima. El equipo del cuestionado Arsene Wenger no terminaba segundo desde hacía 11 años. El alsaciano coge aire.
El City acaba cuarto clasificado, relegando a su rival el United a la quinta plaza. El Chelsea, campeón el año pasado, ha vivido una temporada para olvidar. Tras la marcha de José Mourinho en diciembre con el equipo en 16ª posición, Guus Hiddink lo ha dejado 10º y se queda sin Europa. Al menos, sus fans celebran que su capitán John Terry ha renovado por una campaña más. Así que todos los aplausos se los lleva el Leicester del King Claudio Ranieri, el primer club que estrena trono en Inglaterra desde que el Nottingham Forest lo hiciera en 1978. Poco más que decir de ellos...
Sorpresa mayúscula y refrescante en el fútbol inglés que no lo ha sido en otras ligas de postín. Su derrota por 1-0 a manos del Sassuolo –revelación del año– el 28 de octubre de 2015 dejó a la Juventus en la undécima posición de la Serie A, con 12 puntos sumados en 10 jornadas y a 11 unidades del Roma, líder. Pero entonces sacó a relucir su espíritu de campeón y obtuvo 73 puntos de 75 posibles, para confirmar su quinto título consecutivo. Y Gigi Buffon renueva. Y Paulo Dybala, 22 años, ya no es futuro, sino una realidad.
Luca Toni, último gol
Con la miel en los labios pero devolviendo el orgullo a los napoletani se quedó un Napoli que a pesar de conformarse con la segunda plaza, su estrella Gonzalo Higuaín –el dueño del club le ofrece 7 millones anuales para prolongar contrato– firmó una última exhibición en la jornada final. El delantero argentino anotó una tripleta y elevó su cuenta a 36 goles en 35 partidos, batiendo el récord de Gunnar Nordahl desde hace 66 años como máximo realizador. Un dato revelador, los cinco máximos goleadores de la Serie A son sudamericanos: Higuaín, Dybala, Bacca, Icardi y Eder.
En San Siro, los tifosi del Milan al que ovacionaron fue a Francesco Totti, que quiere seguir un año más, hasta los 39, en su Roma, que terminó tercera. Señorío. Según los datos de ‘‘La Gazzetta’’ solo 26 jugadores han llegado a jugar con 39 años y 16 eran porteros. El de campo más viejo fue Costacurta, hasta pasados los 41, y el portero, Ballotta, con 44. Con sus 600 partidos cumplidos, Totti se mete en el ‘club de los 600’ en Serie A, con Paolo Maldini (647 partidos) y Zanetti (615).
El que deja la capital, la Lazio, es Miroslav Klose, otro veterano de guerra. Se va, pero no se retira. Otro tanto se espera del goleador Toto Di Natale, que deja Udine 12 años después y 209 goles más tarde. A 157 ha llegado otro gladiador del área, Luca Toni, que sí cuelga las botas, a sus 38 ‘velas’. Dijo arrivederci en la penúltima jornada, para así no enfrentarse en la última a su querido Palermo que se jugaba la permanencia, y al final la consiguió. «Nunca he sido un tipo normal», dijo el futbolista en su adiós. «Correr detrás de un balón, marcar goles, celebrar y sufrir en un estadio ha sido mi vida», resumía. Su último gol, ante la Juve, a lo Panenka. Ahora, podrá juntarse más a menudo con sus amigos a jugar a cartas mientras comen pan con chorizo. Placeres de la vida.
El PSG busca nuevo ídolo
En Alemania al Bayern de Pep Guardiola le costó algo menos, pero sacó adelante su cuarta ensaladera seguida, récord. El delantero polaco Robert Lewandowski se convirtió en el primer futbolista en casi cuatro décadas en marcar 30 goles en una temporada, así como en el primer extranjero en conseguirlo. Tras los bávaros, un dignísimo Borussia Dortmund que sumó 78 puntos, convirtiéndose en el mejor subcampeón en la historia de la Bundesliga.
Un paseo militar ha sido para el PSG la Ligue 1. Broche de oro al adiós de Zlatan Ibrahimovic en la capital francesa, con cuyo nombre se bautizará una grada del Parque de los Príncipes. La estrella sueca firmó 38 dianas en 31 partidos y su cuarta liga consecutiva. En su último partido –en el que anotó dos goles–, el público –47.844 espectadores, récord del estadio– se puso en pie para despedir a su ídolo, tras detenerse el partido y salir sus dos hijos a abrazarle. Él es King y Legend. El delantero deshoja la margarita, uno de cuyos pétalos, se dice, apunta al United, con Mourinho en el banquillo, e incluso se habla del Napoli, del que es hincha su superagente Mino Raiola, el que convierte en dinero todo lo que toca.
El Lyon acabó segundo tras golear 6-1 al Mónaco y arrebatarle ese puesto. El desastroso Marsella terminó 13º. Los corsos del Gazélec Ajaccio, el equipo con el presupuesto más bajo de la categoría, regresan a Ligue 2.
Otro que no da cuartel a sus máximos rivales Porto y Sporting lisboeta es el Benfica, campeón por tercer año consecutivo en una última jornada por el título, gracias también a los 32 goles en 34 partidos del brasileño Jonas, ex del Valencia. El fiestón en Lisboa fue por todo lo alto, como el de Leicester.
Clubes que arrasan en sus ligas y otros que reverdecen viejos laureles casi olvidados, como el Club Brujas belga, que le hizo un 4-0 al Anderlecht para devolver el título a la llamada ‘Venecia del norte’... 11 años después. Y lo hizo de la mano de un viejo conocido, el que fuera gran portero belga Michel Preud'homme. «Tengo la sensación de que será una gran noche, o incluso una semana loca», dijo tras la victoria de los flamencos. Siete años también ha tardado el Besiktas en hacerse con el entorchado liguero en Turquía por delante del Fenerbahçe.
Donde se impuso el historial fue en la Premier rusa, y el CSKA acabó llevándose el título, con el Rostov quedándose a un paso del mismo. Y con un palmo de narices se quedó el Ajax en la última jornada en favor de un PSV Eindhoven campeón y que abandona su histórico patrocinio de la firma Phillips en sus camisetas, ‘Philips Sport Vereniging’ (Asociación Deportiva de Philips), 33 años después.
Adioses y despedidas del final de temporada, contando los días para la siguiente, en la que, uno espera, como Eduardo Galeano, que «por suerte aparezca en las canchas, aunque sea muy de vez en cuando, algún descarado carasucia que se sale del libreto y comete el disparate de gambetear a todo el equipo rival, y al juez, y al público de las tribunas, por el puro goce del cuerpo que se lanza a la prohibida aventura de la libertad».