El tercer cuarto baskonista se quita la china grancanaria del zapato
Los de Aíto García Reneses ataron bien a Bourousis, mientras que Hanga y Bertans sufrieron con las faltas.Por fortuna, Tillie reboteó y los bases abrieron una brecha suficiente para no sufrir en el tramo final.
LABORAL K. BASKONIA 81
GRAN CANARIA 76
Hace tres años, un triple a la desesperada de Thomas Heurtel daba la victoria a Laboral Kutxa Baskonia sobre un Gran Canaria mejor en el arranque de los play offs. Ayer no hizo falta ningún tiro salvador, porque el tercer cuarto de los gasteiztarras fue suficiente para quitarse del zapato la molesta china que fue un Gran Canaria que supo detener a Bourousis.
Un parcial de 27-16 después del descanso trajo consigo un colchón alrededor de los 8-10 puntos que los «¡pío pío!» no lograron remontar. Los amarillos vivieron un partido desacertado de Oliver, incapaz de detener a James y Adams, que conforme avanzaba el partido lograban despegar al Baskonia, sobre todo cuando jugaban juntos. Con todo, los de Perasovic no pudieron librarse de la sombra grancanaria hasta el final.
El rebote como espejismo
El 11-2 de inicio resultó un espejismo para lo que fue toda la primera mitad. Por un lado, Darius Adams sacó a relucir su lado más egoísta, jugándose hasta 11 lanzamientos, pero con solo tres aciertos –acabó con 10 de 20–. Asimismo, la ventaja baskonista de inicio se revelaba engañosa, toda vez que provenía de las segundas y terceras opciones que obtenía el cuadro gasteiztarra, gracias al dominio reboteador de Tillie.
Pero el Gran Canaria supo cómo replicar. El quinteto titular no daba pie con bola, pero la entrada de Oliver, Seeley y Omic desatascaba su flujo anotador, hasta el punto de ponerse 13-17, tras un parcial de 2-15.
De ahí al descanso, aunque el resultado acabó siendo un 31-32 adverso para el Baskonia, casi un mal menor, se vio que los de Perasovic no lograban asentar su juego. Roll, en su debut con la elástica gasteiztarra, se encontraba con más minutos y responsabilidades de los que nadie esperaba, al tiempo que Aíto García Reneses explotaba sus carencias en defensa –y su escaso conocimiento del equipo–, ya que Hanga y Bertans se encontraban cargados de personales antes de hora. Solo la falta de acierto en el triple –3 de 15 en el triple– evitaba que el estropicio resultara mayor.
Bourousis asoma justo a tiempo
Asimismo, Bourousis no terminaba de entrar en calor en toda la primera mitad. Planinic ofrecía mejores prestaciones, sobre todo en defensa, mientras que Tillie era el interior que mejor rendía de buen inicio. Pero Bourousis no, que sumaba únicamente al rebote, se veía sin apenas incidencia en el juego de los de Perasovic.
Pero cuando el Baskonia se escapó con un 58-48, ahí sí que asomó el pívot griego. Poco a poco, acabó por meterle varias canastas a un Omic quejica, al tiempo que provocaba que los gasteiztarras, después de tres cuartos de sequía, lanzaran tiros libres. Suyos fueron los tiros para sentenciar el encuentro.
Por otro lado, cabe reconocer el valor de los tres minutos de juego de Shengelia. El georgiano dio mucha viveza al juego gasteiztarra, aunque no por ello sufrió menos. Los Pangos, Báez y Seeley siempre creyeron en el triunfo, aunque les faltó un jugador para cambiar el ritmo, algo que sí tuvo el Baskonia con sus dos bases. Y menos mal.
Los Golden State Warriors no se rinden
Los Golden State Warriors no se rinden. Aunque la Final de Conferencia Oeste todavía beneficie a los Oklahoma City Thunder por 2-3, los vigentes campeones no se dan por vencidos. Los de Steve Kerr salvaron el primer «match ball» al imponerse a OKC por 120-111 en el Oracle Arena.
Y eso que los Warriors debieron lidiar con los 40 puntos que anotaba Kevin Durant y los 31 de Westbrook. Con 31 tantos de Stephen Curry, 27 de Klay Thompson y 15 –más 14 rebotes– de un Bogut que por momentos recordó al de su versión sana en Milwaukee, los californianos aguantaron carros y carretas, llevando siempre la iniciativa en el marcador, logrando así no verse nunca al borde del abismo de la eliminación, aunque en realidad lo estén. GARA