Una línea de crédito que revive las ilusiones
La entidad bilbaina cerraba un acuerdo con la CajaRural de Navarra para poder obtener liquidez antelas tres mensualidades que adeudan y, de paso,desbloquear otras entradas posteriores de dinero.
Al fin llegó la línea de crédito de un millón de euros, y Dominion Bilbao Basket, amén de obtener liquidez para afrontar a sus pagos más urgentes, recupera la «ilusión», como dijera el presidente Xabier Jon Davalillo.
«Hoy es un día de felicidad para la gran familia de Bilbao Basket. Hemos llegado un acuerdo con Caja Rural de Navarra para que se firme una línea de crédito por importe de un millón de euros», anunciaba Davalillo.
El Consejo en pleno –salvo las ausencias de Estitxu Ibarretxe y Curro Guzmán– compareció para dar la buena nueva. El tesorero, Carlos del Campo, concretaba que el «principal problema» para lograr esa financiación, que deberán devolver en cuatro años, fue «activar las garantías necesarias» al carecer el club de un «patrimonio tangible».
«Para ello ha hecho falta poner en valor los activos del club y acreditar documentalmente los ingresos por los contratos de patrocinio, abonos y venta de entradas y, fundamentalmente, el aval de la subvención del ayuntamiento de Bilbo», relataba Del Campo, antes de agradecer el respaldo del consistorio, ante todo la de su alcalde, Juan Mari Aburto.
Quedó por aclarar el futuro de Dominion, cuyo contrato expira el día 30, aunque cobra fuerza la idea de que renovará año a año. Asimismo, Del Campo apuntaba que «estos apuros estaban previstos. El problema es que, desde enero, no hemos podido cerrar la línea de crédito».
«Aunque esta situación ha tenido tintes dramáticos, de esto el club puede salir reforzado. Hay que poner en valor el compromiso de ser transparentes. Esto tenía que suceder una vez; nunca más. Pero necesitábamos dar este paso», zanjaba.
El próximo episodio será convocar una asamblea general extraordinaria y proponer una ampliación de capital para recaudar los 600.000 euros «apalabrados» con distintas empresas. «Nos espera un futuro impresionante», dijo Davalillo.