Amaia U. LASAGABASTER
FIFA

Lloyd repite con un galardón decepcionante

Sería excesivo calificarlo de sorpresa porque el Balón de Oro, o The Best, como es conocido ahora, en su categoría femenina, premia a menudo la fama por encima de los méritos. Y este año ha vuelto a pasar, con Carly Lloyd adjudicándose un galardón decepcionante, cuando no directamente injusto.

El primer corte ya había recibido numerosas críticas, tras dejar fuera a jugadoras como Ada Hegerberg. Qué decir del trío de finalistas, en el que solo Melanie Behringer parecía realmente acreditada para hacerse con el trofeo, frente a la inevitable Marta y una Carly Lloyd cuyo año puede calificarse, a lo sumo, de discreto. Bien, pues la jugadora alemana, campeona de Liga por segunda temporada consecutiva con el Bayern, y oro olímpico –fue, además, la máxima goleadora de los Juegos–, se llevó el menor porcentaje de apoyos entre las tres finalistas. Apenas el 12’34% (solo resultó ganadora en la votación de la prensa), frente al 16’60% de Marta y el 20’68% de Lloyd.

La norteamericana se hace así con su segundo trofeo The Best consecutivo –en 2015 había sido la protagonista indiscutible del oro de Estados Unidos en el Mundial, con hat-trick en la final incluido–, pese a que en 2016 estuvo muy por debajo de su nivel. Tanto a nivel personal –lesionada en abril, lo que estuvo a punto de dejarle fuera de los Juegos– como colectivo: Houston Dash acabó la NWSL en la antepenúltima plaza y Estados Unidos falló estrepitosamente en la principal cita del año, quedando por primera vez fuera de la pelea por las medallas en los Juegos. «Honestamente, no esperaba esto», reconoció la propia Lloyd, que iguala a su compatriota Mia Hamm con dos trofeos, solo superadas por Marta (5) y Birgit Prinz (3).

Broche de oro

Menos «peros» hubo al reconocimiento de Silvia Neid –que ya lo había conseguido en 2010 y 2013– como mejor entrenadora, tras conquistar el primer oro olímpico en la historia de Alemania. La distinción, además, supone un broche de oro a la trayectoria de Neid, que tras los Juegos dejaba el banquillo de la selección teutona, a la que había llevado a ganar también un Mundial y dos Eurocopas. Neid se llevó un 29’99% de los votos, frente al 16’68% de Jill Ellis y el 16’47% de Pia Sundhague.

Daniuska Rodríguez, por su parte, no pudo hacerse con el Premio Puskas al mejor gol, que se llevó Mohd Faiz Subri. La venezolana quedó tercera.

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