Joseba VIVANCO
ALAVÉS

Dos equipos con problemas de gol en los que se imponen las defensas

Mauricio Pellegrino espera un Leganés «muy trabajado» y «peligroso» a la contra, en un duelo donde el apoyo de la grada será clave.

Colgado el cartel de no hay billetes desde hace días. Y eso que enfrente estará el Leganés. Probablemente el mejor resumen de la campaña del Alavés y cómo los albiazules han conseguido conectar con una hinchada volcada con el equipo y ávida de sumar tres puntos que consoliden a los gasteiztarras en la parte tranquila de la tabla. «El comportamiento de la gente con el equipo es increíble, ojalá que podamos transmitir lo mismo», fueron las palabras ayer mismos de Mauricio Pellegrino, enfatizando esta conexión entre jugadores y graderío. Una baza necesaria para hoy cara a desatascar un choque que se presume sin licencias creativas y es que estamos ante dos equipos en los que predominan su papel defensivo y organizado sobre el ofensivo. No hay que descubrir lo complicado que es hacerles gol a ambos, como tampoco lo que les cuesta a ellos perforar la red rival. Respecto a este último dato, baste señalar que están entre los cuatro equipos que más necesitan chutar a portería para marcar: el Leganés tiene de media 14,6 remates por tanto anotado; el Alavés, 10,6. Así las cosas, no sería descabellado pensar en un choque donde cada gol puede valer su peso en oro. Pellegrino sugirió ayer que será un partido «con un rival que ofrece pocas concesiones, muy trabajado», que ha hecho «buenos partidos» y que «son fuertes al contraataque». Espera un encuentro «que tenga mucho ritmo, podamos manejar el balón en su campo y que nuestros mejores jugadores tengan una buena tarde cara a gol».

Cambios en el once

Con la felicidad todavía en el cuerpo del 0-2 al Alcorcón en Copa, el entrenador argentino trató de rebajar la euforia y aclaró que al equipo le quedan «muchos escalones por subir» y que está «muy lejos de cumplir» con el objetivo marcado. El técnico recordó en esa misma línea de su discurso que les queda «mucho por hacer» y que tienen que entregar «todo» para superar cada partido.

El ‘Flaco’’ apostilló que el momento dulce del equipo será «cuando termine la temporada» y cumpla su meta ya que todavía, cree, están «en un proceso de construcción». Finalmente, se alegró por la llegada del último fichaje, Óscar Romero –siguen pujando por Ulloa, del Leicester–, del que dijo «es un jugador de unas características» que no tienen. «Ha hecho varios goles de disparos y de falta, pero lleva un mes parado y adaptarse no es sencillo», matizó.

Las bajas de Feddal y Femenía, sancionados, obliga al argentino a cambios en su once. Se espera que Fernando Pacheco regrese a la portería y esté acompañado por Carlos Vigaray y Alexis, que vuelven al grupo titular, y compartirán espacio en la zaga albiazul con Theo Hernández y Laguardia, recuperado tras el golpe en la sien que recibió en Vigo y que le obligó a pasar la noche en un hospital. En el centro del campo se ubicarán Manu García y Marcos Llorente, que tendrán a Víctor Camarasa como enlace de Ibai Gómez y Édgar Méndez, que ocuparán las bandas, y el carioca Deyverson, que volverá a ser la referencia del Alavés. Los encargados de conectar con ese graderío cuyo aliento no les faltará.