Sin premio a la competitividad
Los 27 puntos de Edwin Jackson, el triple final de Cook y una falta en ataque de Mumbrú labran la derrota bilbaina ante Estudiantes.
MOVISTAR ESTU. 87
RETABET B. BASKET 83
El baloncesto es uno de los deportes en los que más cosas pasan en menos tiempo. Los 26 últimos segundos del duelo entre Movistar Estudiantes y RETAbet Bilbao Basket dieron para un serial completo entre triples ganadores y una polémica falta en ataque de Mumbrú que bien pudo haber sido un «dos más uno» ganador del badalonés. Pero al final, entre la falta señalada al capitán bilbaino, un meritorio triple de Omar Cook y los 27 puntos de Edwin Jackson, Bilbao Basket se volvió de vacío.
Esta vez los hombres de negro hicieron méritos más que de sobra para ganar, superando a base de juego colectivo la ausencia de Michael Eric. A pesar de encajar 30 puntos en el primer cuarto, los jugadores de Carles Durán ofrecieron una imagen más competitiva, empezando por el cuestionado Jonathan Tabu y un Bamforth que, aunque empezó mejor de lo que acabó, ayer ofreció un nivel aceptable.
Después de un mal primer cuarto en defensa, la entrada de Todorovic y Tobias Borg le dio consistencia al juego bilbaino en retaguardia, al tiempo que los triples, que ayer entraron con mayor profusión, daban una cierta ventaja a Bilbao Basket. En el juego interior, Ivan Buva y Víctor Arteaga se hacían mutuamente daño en ataque, mostrando las carencias defensivas del otro. De esta forma, se pasaba del 30-24 al empate a 45 en tiempo de descanso.
Iniciativa frustrada
A pesar de que la tormenta anotadora de Edwin Jackson –MVP de la jornada con una valoración de 44, con 27 puntos y 6 rebotes– llegó tras el receso, también cabe añadir que Bilbao Basket controló mejor el partido en los segundos 20 minutos. No pudo escaparse por la exhibición del escolta francés, pero sí que tomó la iniciativa, alcanzando el último período con un 63-66 a su favor.
La batalla por el rebote acabó por ser estudiantil, aunque toca reconocer la buena labor colectiva bilbaina para controlar este aspecto, después de sufrir algunas sangrías pocas semanas antes. Los tiros ya no entraban tan claramente y el liderato cambiaba de manos con profusión. Una canasta de Bamforth tras rebote de ataque arreglaba una trompicada posesión de los hombres de negro, amén de establecer el empate a 80. Edwin Jackson adelantaba 82-80 a los de Ramiro ya dentro del último minuto, recibiendo el galo la réplica en forma de triple de la mano de Ivan Buva: 82-83 a 26 segundos.
Bilbao Basket ensayó una zona para contrarrestar el ataque estudiantil, pero Dejan Todorovic le dio bastante espacio a Omar Cook, que anotó de tres a 15 segundos del final. Tiempo muerto y balón para Mumbrú en el poste bajo, emparejado a un Jaime Fernández 20 centímetros más pequeño. Mumbrú sacó el brazo para rodearlo, y aunque no siempre se le pita, ayer sí. La competitividad bilbaina se quedaba sin premio.
Durán: «Hay que seguir remando»
«Al igual que el partido de Miribilla, este partido también lo han decidido los detalles», reconocía un disgustado Carles Durán después de la derrota frente a Estudiantes. «Al igual que nosotros tuvimos más acierto en la ida, esta vez ellos han tenido más acierto, por lo que no queda otro que seguir remando», culminaba el preparador de los hombres de negro.
Aunque se le preguntó al respecto, Carles Durán no quiso entrar a valorar la falta en ataque sobre Alex Mumbrú, de forma que prefirió valorar el partido de sus muchachos. Por ejemplo, se mostró crítico con el arranque de los suyos, «en el que en vez de defender, solo buscábamos el robo». Asimismo, también criticó que «nos hemos obsesionado con el bloqueo y continuación» hacia el tercer período, momento en el que «pudimos romper el partido, cuando teníamos unos seis puntos de ventaja, pero no lo conseguimos».
Por su parte, valoró de forma positiva la reacción de los suyos en el segundo período, tras su mal arranque, «donde hemos podido rebotear y correr». A. G.