El entrenador de la Real, Eusebio Sacristán, comenzó a preparar ayer por la tarde el partido del domingo ante Osasuna, que afrontará, de momento, con 19 jugadores del primer equipo, tras las salidas en el mercado de invierno, las lesiones y la sanción a Iñigo Martínez por acumulación de tarjetas.

El central, cuya suspensión de partido por doble amonestación y consiguiente expulsión fue confirmada ayer por el Comité de Competición de la Federación, no será por tanto la única baja de la Real para este compromiso, ya que todo apunta a que no podrá contar nuevamente con Imanol Agirretxe y tampoco parece seguro que Markel Bergara esté totalmente recuperado de la lesión que le ha apartado las últimas semanas de los terrenos de juego.

Se suman a estas circunstancias las salidas de dos jugadores en el mercado de invierno, Rubén Pardo al Betis y Héctor Hernández al Granada, lo que deja dos vacantes sin cubrir en la plantilla realista, que no ha fichado a ningún jugador.

Sin embargo, no parece que esto vaya a ser un problema demasiado grave para Eusebio, pues la nueva configuración deja la plantilla más cercana al número de 21-22 jugadores que prefería tener a principio de la temporada. Así, la salida de Héctor puede ser cubierta, de hecho ya lo está siendo, con la llamada del joven Kevin Rodrigues, el quinto jugador que ha debutado con el primer equipo desde la llegada del técnico castellano.

Otra nota positiva es la recuperación para el encuentro contra Osasuna del lateral Yuri Berchiche, uno de los jugadores más en forma de la plantilla.

Con estos mimbres, el entrenador txuriurdin quiere trabajar con mimo el partido del domingo por lo que solo fue a puerta abierta el entrenamiento de ayer. En esta sesión, que tuvo el control del balón como protagonista, Carlos Martínez siguió con su recuperación sobre el césped, mientras Agirretxe y Bergara lo hacían en el interior.

Granero, por no renunciar a nada

En la comparecencia tras el entrenamiento, Esteban Granero advirtió de que el partido contra Osasuna no será fácil, a pesar de las diferencias en la clasificación, por tratarse de «un rival fuerte y competitivo».

El centrocampista destacó que «tenemos que hacer lo nuestro y prepararnos bien. Hay que afrontar cada partido como si fuera el último. Nosotros queremos seguir creciendo en la segunda vuelta y mirar hacia arriba», insistió Granero para añadir que «a día de hoy no hay que renunciar a nada».

En relación a su situación personal, el jugador madrileño, que cerrado ya el mercado de invierno sigue en la Real cuando en verano no era una de las prioridades de Eusebio, manifestó que sus esfuerzos «están centrados en participar lo más posible en el juego y apoyar en todo al equipo. Yo siempre he tenido claro lo que quería y en ningún momento he pensado en dar un paso hacia afuera», concluyó Granero.