Enrich se queda y, probablemente, Yoel también. Son los principales titulares de los muchos que dejó la rueda de prensa ofrecida ayer por Fran Garagarza. Adrián, Luna, Nano, el convenio con la Real... el director deportivo analizó al detalle la actualidad deportiva y contractual de la plantilla. Y la suya propia, no en vano su contrato expira el próximo 30 de junio.

Aunque en este caso se mostró especialmente hermético y, tras negar con rotundidad que hubiera recibido una oferta de renovación por parte del Eibar o para fichar por algún otro equipo, reconoció sentirse «un privilegiado por las condiciones de trabajo y la confianza del Consejo» y se limitó a responder una y otra vez que tiene «contrato hasta el 30 de junio y bastante tenemos hasta entonces con el trabajo diario».

El mensaje es similar en el caso de José Luis Mendilibar. La pasada temporada el tema de su renovación saltó a la palestra por estas fechas pero se fue demorando, primero hasta la consecución de la permanencia, después por los dichosos «flecos». Es posible que este año suceda lo mismo porque, de momento, Garagarza se limita a asegurar que «no hay nada», aunque reconoce que el técnico está «avalado» por «su valor, su perfil» y toda la labor al frente del equipo desde que llegó.

Si Mendilibar se queda en el banquillo, podrá seguir contando con Yoel. El guardameta, que llegaba cedido el pasado verano, ya ha acordado con el club los términos de su contrato, que sería por dos temporadas. El Eibar, que tiene una opción de compra preferencial, negocia ahora con el Valencia la cantidad a abonar por el traspaso.

Prefirió el Eibar... con mejora

Toca soltar dinero, como habrá que hacer para seguir contando con Sergi Enrich, con el que ya hay un principio de acuerdo para prolongar su contrato, que expira el próximo año, hasta 2019. Con su correspondiente mejora y el incremento de su cláusula, ahora mismo de diez millones. Garagarza reconoció que el Fulham había intentado llevárselo, que el Eibar no cedió y que el jugador también prefirió quedarse. Aunque habría que ver cuál habría sido el desenlace si el Eibar no hubiera accedido a mejorar sus condiciones económicas.

Este mismo domingo, el Fulham se puso en contacto con Garagarza para intentar negociar el fichaje del delantero. La respuesta fue negativa. Los británicos probaron un día después, accediendo esta vez a pagar la cláusula completa, aun- que a plazos. El director deportivo se reunió con el jugador y con la Comisión Deportiva del club y la respuesta fue la misma. Si el Fulham quería llevarse a Enrich, tenía que depositar en la Liga el importe de la cláusula al completo y, además, convencer al jugador. El club inglés se desanimó de forma definitiva, sobre todo porque porque los azulgranas también trabajaron para dificultar la segunda premisa. Garagarza preguntó a Enrich «directamente si se quería ir o no. El me dijo que la opción era muy buena pero que quería quedarse aquí. Es probable que en esa preferencia tenga que ver el acuerdo en el que el club venía trabajando –y que «hemos tenido que acelerar», admitió el director deportivo– para ampliar el contrato hasta 2019, aumentar la cláusula y, sobre todo, mejorar la ficha del jugador, aunque Garagarza aseguró que «el chico también cede porque habría ganado mucho más dinero si se hubiera ido al Fulham». Las partes han dado el visto bueno y se firmará en breve.

Enrich pasará a ser uno de los futbolistas mejor pagados, si no el mejor, de la plantilla. Pero en el club se da por bueno. «Hay que ver el valor y la rentabilidad de lo que tienes en casa. Lo que representa Enrich por minutos, fiabilidad de lesiones, lo que es dentro del vestuario siempre poniendo el grupo por encima del individuo... Hemos hecho un planteamiento que el club en todo momento ha considerado coherente». «Más allá de que las cantidades sean altas o bajas –añadió–, a veces lo barato es caro y lo caro, barato».

Una sentencia que habrá que tener en cuenta con Antonio Luna. El andaluz, que está firmando una temporada magnífica, acaba contrato en junio. El Eibar le ha propuesto la renovación hasta 2019 pero la contraoferta de Luna ha sido «bastante potente. Ahora mismo las distancias son grandes». Garagarza sabe que es un jugador «muy valorado y con mercado, pero no vamos a echar la casa por la ventana», advirtió.

No hay novedades, por otro lado, respecto a Dani García. Garagarza asegura que el capitán, que «merece un respeto máximo», ha rechazado la oferta de renovación. El director deportivo la considera «importante» pero reconoce que, con una temporada más todavía con contrato en vigor, «no hay una alarma como puede haber en el caso de Antonio (Luna)».

Una historia con dos versiones opuestas

Fran Garagarza explicó ayer que el contrato de Adrián expira el próximo 30 de junio y que, por «un error mío» a la hora de firmarlo, está en manos del jugador aplicar o no la cláusula de renovación por una temporada, si juega un mínimo de partidos. Aseguró, además, que se le ha mejorado el contrato «como recompensa, porque se lo merece».

Choca con la versión del jugador, que ayer, en declaraciones a Cope Gipuzkoa, aseguró que «no me han hecho ninguna mejora de contrato». Además, explicó que «en verano, mi agente se puso en contacto con el club porque se lo pedí yo para quitar esa cláusula» y cerrar el contrato hasta 2018. «Durante la pretemporada casi habíamos llegado a un acuerdo pero a principio de temporada, como no tenía mucha continuidad, prefirieron evaluarme de aquí a mayo. Puedo no estar de acuerdo con esa opinión pero la tengo que respetar, igual que ellos me tendrán que respetar cuando yo tome la mía», aseguró. A.U.L.