Ya han cometido nuevas tropelías en TVE, tanto informando como si fuera el NODO al entregarse de manera espectacular al congreso mariano del PP como al tratar con mirada esquinada a la asamblea de los torerillos de Vistalegre como la aparición de Susana Díaz para enredar un poco más en la charca antes socialista. No se puede ser más sectarios y descerebrados que los actuales irresponsables de la información de la cadena estatal. Pero especialmente sangrante ha sido el mal espectáculo que han montado para elegir al cantante que se estrellará en la edición de Eurovisión de este año. Un chaval joven que tiene fans quinceañeras, que provoca remedos histéricos y que salió elegido tras bronca, y sospechas de toda índole. Su corte de mangas está colocado en todas las redes. En mi plataforma de pago tengo la posibilidad de ver series nuevas, algunas muy interesantes, en V.O., lo que me parece una magnífica opción para conocer la voz real de algunas actrices y actores que identificamos con esas voces neutras del doblaje. Por cierto, el doblaje actual, ¿por qué es tan malo? Nuestra idea de que el doblaje es un ultraje, una manipulación artística, no varía, pero antes eran doblajes potentes, reconocibles, magníficos, incluso significantes, pudiendo hacer mejor o peor un personaje. Ahora son muy malos los doblajes. Impersonales, con dicciones mejorables, con traducciones ligeras y de baja calidad.

Está en pleno declive el GHVIP, con todos nominados por castigo de la dirección, y allí se cruza la mierda televisiva con el congreso del PP, porque ese ser nacido para ser una sustancia tóxica constante, Aída Nízar concursante expulsada de esta edición, confiesa que tuvo una relación con Martínez Maíllo que debe ser una suerte de número tres de la banda de Rajoy. Interesantes descubrimientos de los maridajes entre políticos y famosas.