La mejor noticia ahora mismo para la Real es que, pese al mal momento de juego y resultados que está viviendo, todavía se mantiene en puestos europeos. El punto obtenido el sábado frente al Leganés permite a los de Eusebio Sacristán instalarse en solitario en la quinta plaza, acechados por el Villarreal y Athletic, sus rivales más cercanos en la clasificación.

El empate ante los pepineros dejó patente que los txuri urdines tienen un problema en casa esta temporada. Y los números así lo ratifican, pues en lo que se lleva de 2017, de Anoeta han volado los tres puntos coincidiendo con las visitas de Sevilla, Villarreal y Athletic, amén de las dos igualadas obtenidas ante Eibar y Leganés. Consecuencia de todo ello, solo 8 de los 21 puntos caseros en juego se han quedado en Donostia.

Si este contratiempo sigue latente, a la Real se le podría escurrir entre las manos su sueño continental, dado que en lo que resta de calendario no tiene unos desplazamientos en teoría muy favorables. Valencia, Barça y Atlético asoman en el horizonte más próximo.

Precisamente, el Vicente Calderón, inminente parada de la escuadra guipuzcoana, no es un estadio que se le haya dado precisamente bien en las últimas campañas. Un total de nueve goles son los que ha encajado el conjunto vasco en las tres más recientes ocasiones que ha saltado al césped del estadio colchonero.

El ejercicio pasado, sin ir más lejos, regresó tras recibir una goleada (3-0), un resultado muy parecido al de la temporada 2014-15, en la que cayeron por 2-0, o el de la 2013-14, que los anfitriones dejaron patente su superioridad con un claro 4-0. Además, Antoine Griezmann no pierde ocasión de brillar ante su exequipo, marcando dos dianas en las tres últimas visitas.

Condena de los altercados

La Real emitió ayer un comunicado en su página web en el que «lamenta y condena rotundamente los hechos que tuvieron lugar en el bar Edelweiss, del paseo de Zorroaga, en el que seguidores del Leganés fueron agredidos antes del inicio del partido».

El club txuri urdin se solidarizó con ellos y anunció, asimismo, que «va a colaborar en el esclarecimiento de los incidentes, además de estudiar las medidas disciplinarias oportunas, en caso de confirmarse que las personas implicadas sean socios de la Real Sociedad».