OIARTZUN 1

UDG TENERIFE 0

Todos los puntos valdrán igual cuando se haga el recuento dentro de cuatro semanas. Pero por la forma, el rival o el momento, algunas victorias son especialmente satisfactorias.

Como la que logró ayer el Oiartzun, que lo tuvo todo. Porque las azules tuvieron que exprimirse a fondo para imponerse a un contrincante durísimo y acabar celebrando tres puntos que, además de poner fin a su mala racha, amplían su ventaja respecto al descenso. Quedan aún cuatro jornadas y un calendario que provoca tembleque pero el golpe en la mesa que dio ayer el Oiartzun puede resultar definitivo.

No fue fácil, tampoco se esperaba, y se comprobó desde que arrancó el choque, con el Granadilla empleándose a fondo para celebrar un cuarto triunfo consecutivo que le asegurase el billete copero. Pero las locales aguantaron primero y empezaron a verse capaces de responder conforme transcurrieron los minutos. Al aviso de Mugarza, que acabó en córner, le siguió, poco antes del descanso, el gol de Ane Pérez, que tocó en Pisco antes de entrar.

Hubo que esforzarse aún más tras el descanso ante un rival que no se resignó. Tampoco el Oiartzun que incluso pudo ampliar su renta con un gol anulado. Por fortuna no hubo que lamentarlo y pudo saborear tres puntos de rechupete.

En el duelo entre rivales directos, el Espanyol se impuso al Fuda, lo que le saca del descenso. El Oiartzun aventaja ahora en dos puntos a las catalanas y en cuatro a las manchegas.