«Esta es una de las razones por las que es bienvenido aquí, es difícil intentar mantener el control sobre un chico de siete pies que puede jugar fuera del perímetro y tener la pelota», dijo el técnico de Golden State Warriors Mike Brown, sustituto de Steve Kerr, sobre Kevin Durant, que con 38 puntos lideró a la franquicia de Oakland en la victoria sobre los Utah Jazz por 91-102, que eleva el 3-0 para la franquicia californiana.

Si en la Conferencia Este no hay quien tosa a los Cleveland Cavaliers, los Golden State Warriors hacen lo propio en el Oeste. No en vano estas dos franquicias se han repartidos las dos últimas Finales y anillos; y por lo que se ve en esta postemporada, todo apunta a un tercer envite entre ambos contendientes.

Así las cosas, los Utah Jazz se encuentran entre la espada y la pared, por mucho que Gordon Hayward y Rudy Gobert –50 puntos entre los dos, pese a los 7 de 15 del francés en tiros libres– mantengan la «disciplina de fuego» para los de Salt Lake City. Amén de los 38 puntos de Durant, los 23 de Stephen Curry, aunque no tuvo su mejor día –3 de 11 en triples–, fueron demasiado para el conjunto de Utah.

Salvo sorpresa, los Warriors llegarán a la Final de Conferencia con un 8-0 en su haber.