«No es nada romántico levantarte cada mañana con un abismo bajo los pies»
«De igual a igual. 8 historias del comedor social Paris 365», la nueva obra del escritor navarro, se acerca a las vidas de varios usuarios del conocido comedor social de Iruñea. Historias, a medio camino entre la literatura y el periodismo, de pobreza y desigualdad pero también de esperanza y justicia social, pues en la vida de todos los protagonistas se cruzó en algún momento la asociación Paris 365 para ofrecerles una segunda oportunidad.
Patxi Irurzun, ha pasado en solo unos meses de la ficción pura a la realidad más dura. Tras publicar a finales de agosto “Los dueños del viento”, una novela de aventuras ambientada en el siglo XVII, con historias de piratas y brujas vascos (novela que por cierto, tras su buena acogida, se publica estos días en México y pronto tendrá también su edición de bolsillo), en su nueva obra, más cercana al periodismo, narra las historias de ocho usuarios del conocido comedor social de Iruñea Paris 365.
«Cuando yo empecé a escribir, siendo muy joven, lo hice con la convicción algo romántica de que escribir podía contribuir a cambiar al mundo», señaló el autor navarro en la presentación a los medios del libro, en el propio comedor social Paris 365. «Ya no estoy tan seguro, pero sigo creyendo que hay que seguir escribiendo como si eso fuera posible. Por eso mi literatura siempre ha tenido un sesgo social, pero con la ficción se corre el riesgo de cubrir a cierto tipo de personajes (desfavorecidos, perdedores, marginados) con un halo romántico. Es decir, la ficción a veces nos hace tocar la realidad con guantes de látex. A estas historias, por el contrario he tenido que enfrentarme a cuerpo descubierto, y pringarme con la realidad más hiriente».
Son, de hecho, historias, las que se cuentan en “De igual a igual”, como la de Isaac, que atravesó África a pie dos veces, antes de llegar en patera a Europa y ver cómo arrojaban por la borda los cadáveres de algunos de sus compañeros; o la de Cuichán, que por las noches salía a buscar ropa y comida a “El corte inglés” (así llamaban a la ruta por diferentes contenedores). «No hay nada de romántico en levantarse cada mañana con un abismo bajo tus pies, sin saber si ese día podrás comer, o podrás dar de comer a tus hijos; o en pasarse meses sin que nadie te mire a los ojos o pronuncie tu nombre», señaló Irurzun, quien también añadió que a pesar de todo, estas son también historias felices, de gente que se levanta y rehace y dignifica su vida, que encuentra una segunda oportunidad tras haber recalado en la asociación Paris 365.
Para contar las vidas de los protagonistas de “De igual a igual”, Irurzun ha echado mano de diferentes recursos periodísticos y literarios (desde la entrevista al relato, pasando por la crónica o la historia de vida), aunque predominan los textos en las que él mismo como narrador y con su característico estilo, interviene, se plantea preguntas, reflexiones… «No soy un sociólogo, ni un trabajador social, tampoco busco protagonismo, me he acercado a estas historias desde la inseguridad y la duda, como un ciudadano de a pie, con sus temores, a veces sus prejuicios».
Y el autor, colaborador de GARA, añade que ha descubierto de ese modo varias cosas, «por ejemplo, que los protagonistas de estas historias pudimos o podemos ser un día nosotros mismos; o que a veces cuando alguien se encuentra en una situación de precariedad absoluta, no siempre lo que más necesita es un plato caliente y un techo, que también, sino que alguien le mire a los ojos, pronuncie su nombre, lo abrace, lo trate con dignidad».
“De igual a igual”, concluyó el autor, «quizás no cambie el mundo, pero yo me daría por satisfecho si consigue transmitir que el trabajo de asociaciones como el Paris 365 consigue que el mundo de algunas personas cambie».
“De igual a igual. 8 historias del comedor solidario Paris 365” lo publica Pamiela con Paris 365 y está a la venta en librerías y en el propio comedor social.