BURGOS CF 2

REAL SOCIEDAD 3

Ni el rival –la Real ha apostado por tests de nivel bajo para esta recta final de la pretemporada– ni el estado del césped –seco y con falta de hierba en algunas zonas– permite sacar grandes conclusiones sobre el estado actual de la Real, pero el gol de Mikel Oyarzabal en la prolongación edulcorará las sensaciones de una prueba que dejó algunas dudas en torno al equipo txuriurdin. Con todo, lo mejor fue que jugadores a priori fundamentales como Iñigo Martínez –cada vez más lejos del Barcelona y que terminó de capitán– o De la Bella jugaron sus primeros 90 minutos seguidos y que no hubo lesionados, aunque Diego Llorente se retirara quejándose de ese hombro izquierdo que le venía molestando durante los últimos días.

En definitiva, que el de ayer en el Plantío fue un test con claroscuros a diez días de que el balón eche a rodar con seriedad, con la incorporación de jugadores primordiales y los detalles técnicos de un Januzaj que se estrenó como goleador y las alternativas que se le abren a Eusebio, sobre todo arriba, para aquellos que vieron la botella medio llena y con la falta de contundencia atrás –los dos goles locales vinieron de sendos errores– y la falta de profundidad en ataque –la Real tuvo la posesión pero le costó transformarla en ocasiones– como argumentos para los más cenizos. Seguro que hoy habría muchos más de estos últimos si Oyarzabal no hubiera empujado a la red el rechace de Saizar al remate de William José en el 92.

Para su penúltimo test antes de que comience la competición de forma oficial, Eusebio puso un once en el que introdujo a todos los nombres propios de la actualidad del verano txuriurdin; los dos fichajes Diego Llorente y Januzaj, otros dos que están de vuelta como Agirretxe y De la Bella, y otros dos que han protagonizado horas de tertulias y comentarios como Iñigo Martínez y Carlos Vela, que ejerció de capitán a las pocas horas de hacerse oficial su marcha en invierno, brazalete que quedó en el brazo del ondarrutarra tras la sustitución del azteca.

Dos del Sanse de inicio

Tras haber tenido muchos minutos en la gira holandesa, la presencia de jugadores del Sanse se redujo esta vez a la presencia de Gorosabel, que fue de menos a más y terminó muy bien el partido, en el lateral derecho y de Guevara, jugador de jerarquía, en el doble pivote junto a Rubén Pardo, que no termina de hacerse con la manija del equipo y fue el primer sustituido tras el descanso.

Por delante, fue interesante comprobar las nuevas alternativas que tiene Eusebio, colocando ayer a Oyarzabal por el centro, en el lugar de los ayer lesionados Xabi Prieto y Canales, Con Januzaj por la izquierda y Carlos Vela por la derecha. El belga está fresco y sin exigencias defensivas, ayer habilitó muy bien a sus compañeros, a los que se asoció con fluidez.

En una primera parte en la que la Real monopolizó la posesión del balón, un 73%, el mayor peligro se generó por el costado izquierdo y por ahí llegó también el primer gol, con la recuperación de la conexión De la Bella-Agirretxe, otra buena noticia, cabeceando el usurbildarra un buen centro del catalán, que recibió de de Januzaj.

El exjugador del Manchester United se estrenó como goleador con su nuevo equipo al plantarse solo delante del meta local y definir dejando constancia de su excelsa técnica.&discReturn;

Sin embargo, cuando todo parecía más que encarrilado fue cuando peor le fue a los de Eusebio. Patxi Salinas apostó por que su equipo achicara espacios y diera un paso atrás y la jugada le salió bien, gracias a un importante error de Diego Llorente, que no tuvo en cuenta lo seco que estaba el campo al retrasar un balón a Toño y Abel Suárez, al segundo intento, no desaprovechó el regalo.

Pudo la Real obtener el tercero, pero lo que llegó, en plena vorágine de cambios –el entrenador local hizo ocho de una tacada en el 84–, fue el empate del Burgos, en un corner muy mal defendido por los visitantes y cabeceado por Pablo a la red.

Este tanto espoléo el orgullo realista, que buscó el empate con un ahínco que se echó en falta minutos antes y Mikel Oyarzabal encontró ese gol para refuerzo personal y colectivo.