Dos días
Algunos políticos sexagenarios consideran que es el momento de mayor preocupación democrática de los últimos 40 años. ¿El 23 –F no existió? Allá ellos. La presión mediática es de una intensidad inusitada. En La Sexta dan paso a miembros de diferentes partidos políticos, pero a los que apoyan las tesis independentistas siempre intentan machacarlos. Preguntan y preguntan y vuelven a repreguntar para encontrar contradicciones. Preguntas con una posición anti referéndum que producen una cierta vergüenza. Cuando entrevistan a los suyos, se muestran serviles, colaborativos, enjundiosos loritos con lo de la ilegalidad, la constitución, y toda la monserga inmovilista.
Mamen Mendizabal en “Más Vale Tarde”, entrevista al párroco de Calella, Cinto Busquet, y no tuvo otra ocurrencia que preguntar: «Usted cree que Dios es independentista?». Cinto se mosqueó. Cinto le sacó los colores a Mamen. Mamen quedó retratada. Cinto se subió a la parra, echó su proclama sin respirar, mantuvo su posición a favor del Sí con argumentos sólidos y acabó repitiendo varias veces, que lo único que querían era votar en “paz y amor”. Y que no les enviase a los policías. O sea, una magnífica actuación. Mamen se pasó de tiempo, y sofocada despidió la entrega del programa murmurando. ¿Volverá Mosén Cinto a su programa? Puede ser un buen tertuliano. Faltan dos días para el día en que habrá más despliegue policial del mundo sobre un territorio concreto. Las mentiras de los responsables de Interior del Gobierno de la banda son ridículas. Hay una voluntad de intimidación, de españolizar la represión. Anuncian de manera alarmante que se están desplazando “radicales” de toda Europa. Y con eso señalan a gente solidaria de izquierda. Los ultras, los nazis, los de Falange son del extremo centro español. Y están donde Piolín.