Landa quiere correr el Tour con la Fundación y con los mejores vascos
Orbea y Etxeondo apuestan por el proyecto y asumirán el coste del equipo continental en 2018 y Jesús Ezkurdia, representante del alavés, busca apoyos para poder lograr el presupuesto para cumplir ese deseo. Destacan el compromiso de los ciclistas con el proyecto.
Jesús Ezkurdia, representante de Mikel Landa y persona de confianza en la Fundación Euskadi desde que ha asumido el relevo de Miguel Madariaga, y Jon Fernández y Paco Rodrigo, máximos responsables de Orbea y Etxeondo, trasmiten en una charla con GARA el objetivo del alavés de disputar con sus colores el Tour en el plazo más corto posible con los mejores vascos.
Ezkurdia señala que no es solo un deseo de Mikel Landa, sino compartido por los ciclistas vascos más significativos. «El apoyo es impresionante. Los corredores vascos son muy raros. Los equipos te dicen que pueden facilitar a los ciclistas fijar su residencia en países como Andorra, Mónaco o Suiza para no tributar tanto y todos los vascos pagan aquí sus impuestos, incluso el 50% de lo que cobran. No solo es Mikel. Y que esos ciclistas de nivel quieran volver a casa nos da gasolina. Te dicen que se les pone la piel de gallina solo con pensar en correr el Tour con una selección vasca. Y lo que hacemos es trabajar por conseguir esos apoyos para poder volver con ellos al Tour. Y estos corredores, en contra de lo que pueden decir otros, creen en el futuro del ciclismo vasco. Te dicen que si ha dado buenos ciclistas antes que ellos, también los habrá después. Ellos se lo creen».
Paco Rodrigo reconoce que «si aparece Mikel, que es el que más tiene que perder, altruista y dice que mi ilusión es correr en los Campos Elíseos con la Fundación, que estaba casi muerta, con el nombre de Euskadi, te engancha. Se podía haber cogido mucho antes, pero tenemos que intentar avivar esa llama».
Jesus Ezkurdia añade que «se juntaron todos los astros, somos gente diferente, cada uno tiene el prestigio que le avala. Se junta la Fundación, con 25 años, con socios, con lo que ha significado incluso para gente de fuera del ciclismo. La Fundación es otra cosa, nos aglutinaba a todos. Se dan las circunstancias de que la Fundación sigue siendo eso y que Mikel engancha, con ese punto que está en la élite y se cree lo que es la Fundación».
Paco Rodrigo entiende que «nos identificamos como empresas vascas que nos ha costado llegar a tener prestigio a base de trabajar. Estamos orgullosos de que por ahí nos vean como empresas vascas. Queremos que este proyecto, aunque tenga dificultades e inconvenientes, haga que nos sintamos más identificados como empresas vascas».
Orbea apuesta por la Fundación
Jon Fernández, director general de Orbea, añade que «hemos estado toda la vida con la Fundación. La hemos acompañado en su crecimiento y hemos ido creciendo al mismo tiempo. Ha sido una simbiosis perfecta. Nos hemos internacionalizado con una identidad de marca muy vinculada al territorio. Para nosotros el 2013 fue un año negro. no solo porque desaparece Euskaltel, sino porque éramos conscientes de que íbamos a tener grandes dificultades para tener un elemento que correspondiera a los valores que como marca tenemos. Estuve trabajando en primera persona para que Euskaltel no desapareciera, para que se fusionara con equipos norteamericanos... Para nosotros casi fue una travesía del desierto porque sabíamos que iba a ser duro y hemos ido navegando como hemos podido».
Orbea entendió que debía seguir en el Tour y por eso se unió a Cofidis con una relación que acabará a final de temporada y para 2018 espera seguir en la Grand Boucle con el nuevo Vital Concept de Coquard y Pineau.
Pero Jon Fernández deja claro que la apuesta de Orbea está en la Fundación: «Cuando me llamó Jesús se me pusieron los pelos como escarpias. Queremos que Mikel llegue a liderar un equipo con los grandes corredores vascos y que seamos capaces de correr el Tour con ellos».
Quieren conseguirlo cuanto antes para aprovechar la generación que está ahora en el World Tour. Hasta 2019 tanto Landa como la mayoría de los mejores vascos tienen contrato y en 2020 sería el primero en el que se podrían juntar en la Fundación si se consigue el apoyo económico necesario.
Para 2018 Orbea y Etxeondo van a aportar el dinero necesario para que el equipo compita en la categoría continental con el nombre de Fundación Euskadi. Había otras firmas interesadas en aparecer en el maillot, pero han preferido que salga sin publicidad y con un equipo que dará la oportunidad de pasar a los mejores corredores del equipo amateur, que desaparece.
Los nuevos responsables de la Fundación han preferido reforzar otros equipos vascos y que los jóvenes vean que desde cualquiera se puede pasar. Además han llegado a un acuerdo con la UPV para ayudar a corredores juniors para que puedan tener preparadores sin coste ninguno.
La Fundación ayudará a la cantera, pero se centrará en su equipo profesional. En el año 2018, bajo la dirección de Jorge Azanza, está confirmado el salto de Mikel Alonso, Juan Antonio López Cozar, Ibai Azurmendi, Gotzon Martín, Marc Buades y Diego López junto a Peio Goikoetxea (AMPO), Txomin Juaristi (Baqué) e Iker Azkarate (Caja Rural). El equipo se refuerza además con dos profesionales que han ganado este año en Asia, Ricardo García y Egoitz Fernández.
Proyecto ante las instituciones
Hay cantidad de peticiones de nuevos socios desde la llegada de Landa y los esfuerzos se centran en conseguir apoyos para crecer en el futuro. Jesús Ezkurdia apunta que «sabemos a dónde queremos llegar y que Orbea y Etxeondo nos dejen resuelto el 2018 ante las instituciones me arma de valor. Les hemos presentado este proyecto y antes de la presentación el consejero nos preguntaba si íbamos a pedir y le decimos que no, que venimos a informar. Y cuando acaba la reunión, y sigue esperando que le pidamos, le repetimos que no vamos a pedir, sino a informar».
Rodrigo entiende que «necesitamos el aval de todos. La clase política nos tiene que ayudar, pero no es nuestro objetivo. Sabíamos que nadie nos iba a regalar nada y la administración sabe qué queremos hacer y que no vamos a pedir cuando sabemos que no nos pueden dar».
Porque no es solo lo económico, hay dos proyectos que ahora se marcan el objetivo de volver a correr el Tour como representantes vascos y Rodrigo deja claro que «a Murias no le queremos poner ninguna pega».
Orbea mantendrá su relación con Euskadi Murias, que dará el salto a profesional continental en 2018, en base a un contrato que recoge unas aportaciones en materiales y económica en función de la categoría deportiva. Jon Fernández apunta que «tengo una relación fluida con Jon Odriozola y Paulino, hablamos con normalidad y soy bastante transparente. Orbea quiere poner la bandera en todo lo que suene a ciclismo vasco. Seguiremos con Murias, pero saben que el corazón de Orbea está en la Fundación. Yo vengo aquí con Jesús y Paco, pero no estoy con Paulino y Jon explicando el proyecto del Murias».
«¿Le has llamado ya a Miguel?»
Jesús Ezkurdia deja en evidencia lo que Mikel Landa siente por la Fundación –ayer twitteaba al respecto y acudió a presentar junto a Miguel Madariaga la I. Bicicletada Popular Solidaria Bridgestone–, al recordar cómo se fraguó el traspaso de poderes: «Jorge Azanza, amigo de Mikel y mío, me dice que Miguel Madariaga les ha dicho que desaparece la Fundación, que tira la toalla. Más pensando en buscar la salida profesional a un amigo, voy al Tour, estoy con Mikel, le digo lo que me ha dicho Jorge y para Mikel la Fundación es su corazón, se ha creado aquí. Me dice que es su casa y que eso no puede pasar. El viernes, el día antes de la crono del Tour, me dice que le llame a Miguel para saber si es verdad. Me lo dice a la nueve de la noche y el día de la crono a las nueve de la mañana me lo repite y decido llamarlo. Miguel me lo suelta todo y veo que es verdad y le digo que Mikel me ha dicho que le llame para echarle una mano con un patrocinio personal, algo económico».
«Mientras hace rodillo –prosigue Jesús Ezkurdia– me pregunta otra vez si he hablado con Miguel y le digo que sí y que se centrara en la crono. Y se queda a un segundo del podio y a la noche me vuelve a preguntar qué hacer con la Fundación. Y al día siguiente en París me dice que si el problema es económico y Miguel no puede seguir, él pone la pasta y ahí vi que iba en serio. Acaba el Tour, se viene a casa y me quedo en París y pensaba que se iba a enfriar, pero no. Me insiste y nos reunimos con Miguel y dijo que se iba si nosotros entrábamos. Todos teníamos claro que Miguel tenía que salir porque todas las personas a las que llamamos nos ponen la misma condición y él por primera vez reconoce que ha llegado a un punto que no había podido con esto, que la Fundación necesitaba ese relevo y acepta salir».
A partir de ahí «Mikel en Vuelta a Burgos me pide que hable con Orbea y Etxeondo. Pasó a profesionales con el Orbea, tiene su parte sentimental y pongo una condición porque cuido su imagen y Mikel sabe a dónde quiere llegar con este proyecto. No piensa en un equipo sub’23, sino en volver a llenar las cunetas con la Fundación y quiere rodearse de los mejores y me dice que necesitamos a las dos empresas vascas más potentes, Etxeondo y Orbea. Llamé a Paco y a Jon y de entrada no me dijeron que no. Nos juntamos en Etxeondo con Mikel y trasmitimos el concepto que queremos. No queremos patrocinadores. Son más que un patrocinador, son país y la Fundación es país. En una hora nos dicen que entran si Miguel salía. Y él compartía que debía salir y por eso el 27 de agosto fuimos a notario y escrituramos ante un notario y lo escenificamos en la Vuelta».
Paco Rodrigo (Etxeondo) agradece el trabajo de Madariaga porque «agrupó al país, aprovechó muy bien los apoyos que tuvo y logró lo que ha conseguido y que saliera bien, con la imagen como país que se ha trasmitido, pero ahora queríamos recoger el testigo limpio para sacar el equipo con nuevas posibilidades».
Jon Fernández apunta que «Orbea ha estado con la Fundación siempre, lleva 25 años apoyándola. Por eso no era un condicionante que saliera Miguel. Pero al comenzar un proyecto ilusionante difícilmente podía arrancar con esa mochila. Cada uno tiene un carácter y Miguel era un obstáculo para generar un proyecto ilusionante y era improbable que tuviera éxito con él dentro».J.I.