Pena mínima
Tres guías franceses han abierto este octubre una escalada de muy alta dificultad y riesgo, en estilo alpino, en la cara sur del Nuptse Nup II (7.742m). Atienden por el nombre de Gang des Moustaches y posan con sus enormes bigotes en las fotos de grupo. Dado que no se puede estar limpio y bien afeitado en una expedición y teniendo en cuenta que somos franceses, mejor hacerlo con estilo, declaran. Eso sí, uno dice que intentará mantenerlo a pesar de que su novia asegura no permitírselo más allá de finales de noviembre. También este octubre, otros tres guías franceses abren una vía de dificultad al Pandra (6.700m), montaña cercana al Kangchenjunga y, cosa curiosa, atienden por el nombre de la Banda de los Calvos, los tres calvos como bolas de billar (uno de ellos hace trampa y se le ve afeitado). Han dado a la vía el nombre de Peine Plancher, nombre con que se conoce en Francia a un suelo de pena mínima que debe imponer un juez según los casos, sobre todo en reincidentes. Siendo muy discutida jurídicamente (y política y socialmente) en Francia esta obligación, impuesta por el gobierno Sarkozy en 2007, que va contra el principio de personalización de las penas atendiendo a las circunstancias, fue derogada en 2014. Como apunte leo que en California se aprobó en 1994 una ley, que obliga a imponer 25 años de prisión a perpetuidad a la tercera condena, cualquiera que sea la infracción cometida, la llamada “Three Strikes and You are Out”. Buen nombre para una vía.