El fiscal Mueller tiene miles de mensajes del equipo de Trump
El cerco se sigue estrechando en torno a Donald Trump y su equipo en relación a la posible interferencia de Rusia en la campaña electoral. El fiscal especial Robert Mueller tiene en su poder decenas de miles de correos electrónicos del equipo de transición del magnate, que ha denunciado que fueron obtenidos de forma ilegal.
El entorno del presidente estadounidense, Donald Trump, lanzó ayer un nuevo contraataque para generar dudas sobre la credibilidad de la investigación de la supuesta injerencia de Rusia en las elecciones presidenciales que llevaron a la Casa Blanca al magnate neoyorquino y que no deja de estrechar el cerco sobre los colaboradores más cercanos del mandatario. Tras haber imputado a cuatro hombres cercanos a Trump –tres vinculados a su campaña– y haber conseguido la colaboración de su exconsejero de Seguridad Nacional Michael Flynn, ha trascendido que el fiscal especial del «Russiagate», Robert Mueller, tiene en su poder decenas de miles de correos electrónicos del equipo de transición del presidente, pero su entorno ha acusado a Mueller de haberlos obtenido ilegalmente.
En una carta enviada a los comités del Congreso y del Senado, el abogado Kory Langhofer, del grupo Trump for America, asegura, en un intento de desacreditar al fiscal, que el equipo de Mueller recibió ilegalmente los correos relacionados con la investigación por parte de la agencia gubernamental Administración de Servicios Generales (GSA), encargada de facilitar las transiciones presidenciales.
Según la misiva, citada por la cadena Fox y la web Político, entre otros medios, la divulgación de esas decenas de miles de emails con «información privilegiada y confidencial» pueden suponer una violación de sus derechos constitucionales.
El grupo Trump for America utilizó las oficinas, el equipo y el servidor de correo de la GSA en el periodo entre la elección de Trump, en noviembre de 2016, y su toma de posesión en enero.
Langhofer aseguró en la carta que la oficina del fiscal Mueller obtuvo los registros de la GSA pese a ser «consciente» de que esa agencia «no poseía ni controlaba esos registros» y que «usó ampliamente ese material» en sus investigaciones.
El portavoz de Mueller, Peter Carr, defendió el trabajo del fiscal especial tras la publicación de la carta. «Cuando hemos obtenido correos electrónicos en el transcurso de nuestra investigación criminal en marcha, nos hemos asegurado de contar con el consentimientos del propietario de la cuenta o con el proceso criminal apropiado», informó la CNN, citándole.
Mueller anunció el pasado día 1 de diciembre cargos contra el exasesor de Seguridad Nacional de Trump, Michael Flynn, el único colaborador acusado que también prestó servicios en su Administración tras haber tomado posesión al frente de la Casa Blanca.
A cambio de declararse culpable de mentir al Buró Federal de Investigación (FBI) sobre sus contactos con el embajador ruso Sergey Kislyak, Flynn aceptó cooperar con el equipo de Mueller en la investigación a medida que esta avanza.
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Los republicanos del Congreso se preparan para votar mañana la reforma tributaria impulsada por Donald Trump, que recortará los impuestos a las empresas y grandes fortunas y supondrá su primera victoria legislativa. La reforma supondrá grandes cambios en el sistema impositivo, recortando los impuestos para muchos ciudadanos (del 39,6% al 37%), pero sobre todo para las empresas (del 35% al 21%), e impondrá nuevas limitaciones a las desgravaciones fiscales.GARA