El vizcaino Jon Rahm se había presentado en la cuarta y última jornada del Waste Management Phoenix Open, torneo del PGA disputado en Scottsdale (Arizona), con serias opciones de luchar por el título en el lugar donde creció como golfista. El sábado acabó su recorrido en segunda posición, a tan solo un golpe del líder, el estadounidense Rickie Fowler (-14), por lo que su quinto triunfo como profesional estaba a un suspiro.

Sin embargo, los primeros hoyos completados hasta el cierre de esta edición, un total de 9, alejaron al jugador de Barrika hasta la 4ª posición, a dos impactos del líder, en ese momento el estadounidense Chez Reavie (-16). Rahm estaba firmando una tarjeta con dos «birdies» por un «bogey» en el primer hoyo que completó ayer, lo que le situaba a uno bajo el par.

De hecho, comenzó dubitativo, con ese «bogey» en el primer hoyo que lo relegó varias posiciones provisionales. Cuatro hoyos consecutivos a la par dieron paso a una posible remontada con dos «birdies» en el 6 y 8.

Con opciones gracias al sábado

El sábado, tras una jornada de viernes en la que acabó a tres golpes del líder, en ese momento el estadounidense Daniel Berger –ayer ya había caído posiciones–, Jon Rahm ofreció una espectacular tarjeta de 65 golpes, solo superado por los 64 de Matt Kuchar y Beau Hossler.

El jugador de Barrika, que aspira a lograr el número 1 del ránking mundial que ocupa Dustin Johnson –aunque no puede hacerlo en este torneo aun ganando–, se hizo con dos «birdies» en la primera mitad del campo y aunque comenzó mal la segunda parte al cometer «bogey» en el hoyo 10, se recuperó a continuación con cinco «birdies», tres de ellos consecutivos entre el 15 y el 17.