La tenista japonesa Naomi Osaka, de tan solo 20 años, logró ayer el primer título de su corta carrera al imponerse en la final de Indian Wells, el primer Masters 1.000 de la temporada, a otra veinteañera como la rusa Darya Kasatkina por 6-3 y 6-2.

Este triunfo en uno de los torneos más importantes del calendario no solo le otorga el trofeo y el respectivo premio en metálico –hasta ahora había ganado 1,5 millones de dólares en su carrera–, sino que además le ascenderá en el ránking mundial del actual puesto 44 al 22. Además, es la primera japonesa en la historia que se alza con el título en el desierto californiano. Únicamente Kimiko Date (1996) y Naoko Sawamatsu (1995) llegaron a semifinales previamente.

Antes de vencer sin demasiados problemas a Kasatkina, 19ª de la WTA, la joven japonesa había eliminado a dos ex números uno del mundo –la rusa Maria Sharapova en primera ronda y la checa Karolina Pliskova en los cuartos de final–, así como a la actual número uno, la rumana Simona Halep, en semifinales y a una ex número dos como la polaca Agnieszka Radwanska en segunda ronda del torneo.

Además, Osaka abandona California con un solo set perdido en todo el torneo, ante la griega Maria Sakkari, contra quien ganó por 6-1, 5-7 y 6-1 en octavos.

Federer-Del Potro, la otra final

Al cierre de esta edición, el suizo Roger Federer, número uno mundial y que defendía el título en Indian Wells, y el argentino Juan Martín del Potro disputaban la final masculina con un set para cada uno –6-4 para Del Potro y 7-6(10) para Federer–.

A pesar de llevarse siete años de diferencia, ambos reencarnan a la perfección el despertar de dos tenistas que parecían ya en su declive en el caso del helvético y al abandono en el caso del ‘gigante’ sudamericano, debido a las lesiones en su mano.

«Hemos tenido muchos partidos cerrados. Se me vienen a la cabeza semifinales de Roland Garros, finales del Abierto de EEUU, semifinales de los Juegos Olímpicos, finales en Basilea... Fueron buenos partidos. Va a ser un emparejamiento interesante», señaló en la previa Federer, quien tuvo que sudar de lo lindo en semifis ante Coric para lograr el pase a la final. Del Potro, por su parte, había apabullado al canadiense Milos Raonic por 6-2 y 6-3 en solo 66 minutos.