L a ópera prima de Clara Martínez-Lázaro se ha presentado en el festival de Málaga con el respaldo de Emilio Martínez-Lázaro, productor de la película. La hija quiere encontrar una voz propia dentro del cine más joven y de la comedia coyuntural, aportando apuntes autobiográficos a una crónica generacional sobre las mujeres que atraviesan la crisis de los treintaitantos, y que no terminan de encontrar su sitio en el mundo y su verdadero papel en la vida o en las relaciones con los demás.

La protagonista, que se llama Emma y está interpretada por Silvia Alonso, ha de enfrentarse a sus propias contradicciones. A pesar de que escribe cuentos infantiles no se siente preparada ni decidida para ser madre, desatendiendo de momento a lo que parece decirle el reloj biológico de forma insistente. El problema es que su balance sentimental es muy inestable, con lo que la perspectiva de la maternidad no acaba por asentarse definitivamente. No así para sumejor amiga Lola, encarnada por Barbara Goenaga, que está emabarazada y piensa ya en el nacimiento del bebé. A tal fin ha decidido que Emma sea la madrina, a ver si así le entra el gusanillo. Tal vez suceda después de conocer al que será el padrino, un Vito Sanz que le hará cambiar su pensamiento acerca de la pareja.