Doha abre mañana la Diamond League 2018, la competición de atletismo por excelencia que reúne a los deportistas más laureados del planeta. Al término de las doce primeras reuniones en Birmingham, los mejores en cada prueba serán invitados a las dos finales, Zúrich y Bruselas, que repartirán los minerales más duros a los campeones.

Si entre las ausencias más destacables está la figura del ya retirado jamaicano Usain Bolt, el velocista más laureado de la historia, en Doha destaca la presencia de Caster Semenya. Más que por su presencia –es habitual en estos mítines–, la participación de la sudafricana es noticia porque es la principal afectada por la nueva normativa de la IAAF sobre límites de testosterona en mujeres para competir. Semenya tiene niveles de testosterona tres veces por encima del rango de normalidad en mujeres a causa de una alteración genética y su caso desató una larga polémica desde que en los Mundiales de Berlín 2009 avasalló a todas sus rivales en los 800 metros con una marca de 1:55.45 que el año pasado rebajó hasta los 1:55.16.

A partir de noviembre próximo, para competir como mujer en carreras que van desde los 400 metros hasta la milla habrá que tener los niveles de testosterona por debajo de los 5 nanomoles por litro de sangre. Las atletas con hiperandrogenismo tendrán que medicarse para entrar en ese rango, si quieren competir. Tres días antes del mitin de Doha, Semenya, actual campeona olímpica y mundial de 800, se declaró «orgullosa» de ser como es. «Dios me hizo como soy y así me acepto. Soy quien soy y estoy orgullosa de mí misma», escribió en Twitter.

La sudafricana es la favorita mañana en los 1.500 metros.

100 metros de aúpa

El programa femenino ofrece además una atractiva carrera de 100 metros en la que intervienen la campeona olímpica jamaicana Elaine Thompson, invicta el año pasado en la Diamond League; la campeona mundial de 200, la holandesa Dafne Schippers, y las marfileñas Marie-Josée Ta Lou, subcampeona mundial de 100 y 200, y Murielle Ahouré, actual campeona mundial de 60 bajo techo.

La pértiga pondrá en acción a la número uno mundial desde la retirada de Yelena Isinbáyeva, la griega Katerina Stefanidi, que se enfrentará, entre otras, a la estadounidense Sandi Morris, la atleta que la derrotó este año en los Mundiales en sala, y a la venezolana Robeilys Peinado, bronce mundial en 2017.

El campeón olímpico de altura, Mutaz Essah Barshim, volverá a ser el ídolo local en su debut al aire libre junto a familia y amigos. El saltador qatarí cerró el año 2017 invicto en sus once competiciones, con el título mundial en el bolsillo y el galardón de mejor atleta del año.