Las bases de Podemos votarán desde hoy y hasta el domingo en la consulta convocada por el secretario general, Pablo Iglesias, para decidir si él y su pareja y portavoz en el Congreso, Irene Montero, deben dimitir tras la polémica por la compra de su chalet de 600.000 euros; una consulta que critican varios líderes autonómicos aunque muchos admiten que ambos cometieron el «error» de «no medir bien» el impacto de su decisión. Iglesias y Montero volvieron a defenderse y subrayaron que son las bases y no los «barones» territoriales los que toman las decisiones y a quienes debe consultar un político decente cuando se ve cuestionado.

El líder de Podemos Asturias, Daniel Ripa, cree que es un error «problemático» que se consulte a los inscritos sobre una cuestión de debate público que está desgastando a Podemos. También los líderes más visibles de la corriente Anticapitalistas, Miguel Urbán y Teresa Rodríguez, sostienen que la consulta es «innecesaria», pero denuncian una campaña de acoso «brutal».

La portavoz en la Asamblea de Madrid, Lorena Ruiz-Huerta, añadió que antes de consultar sobre asuntos personales, echa de menos consultas de «contenido político».

El navarro Carlos Couso, portavoz de Podemos en el Parlamento, considera que la compra del chalé «denota cierta mentalidad pequeño burguesa», palabras desautorizadas poco después por la dirección navarra.

Líderes de Catalunya, Castilla y León, Madrid e Illes Balears animaron a participar en la consulta para avalar que Iglesias y Montero sigan dirigiendo el destino de Podemos. Esa es la posición también de Íñigo Errejón, para quien el acoso y la «violación de la intimidad» han cruzado todos los límites.