El martes Marta Macho, una de las personas que alertó de las irregularidades en la OPE de Osakidetza, acudió al Palacio de Justicia de Gasteiz para ratificar su denuncia. Y el miércoles el Servicio Vasco de Salud le comunicó la rescisión de su contrato como anestesista en el Hospital Alto Deba a 31 de mayo.

Macho estaba cubriendo una reducción de jornada y la titular del puesto había pedido un excedencia, una circunstancia de la que echaron mano Osakidetza y el Departamento de Salud para justificar la rescisión de la relación contractual.

Este hecho fue denunciado ante los medios de comunicación por Patxi Nicolau, del sindicato ESK, que ayer advirtió de que los Servicios Centrales de Osakidetza reconocieron en el último minuto la interinidad del puesto a la anestesista, con lo que se «consolida» su situación laboral en Arrasate.

A su juicio, el Servicio Vasco de Salud quiso «obviar» la normativa en el caso de Macho porque lo que buscaba, «cuando menos, era generar una situación de angustia personal». Como apuntó en días anteriores, se ha tratado de un acto «represivo» que se ha topado de frente con «la denuncia sindical y mediática», que han obligado a dar marcha atrás a los responsables de Osakidetza.

Oposición y total rechazo

La propia Macho también considera que Osakidetza ha rectificado por la denuncia de la central sindical y el eco mediático que esta ha tenido. «Osakidetza se ha dado cuenta de que ese no era el camino», indicó ayer en declaraciones a NAIZ Irratia, donde afirmó que la rescisión de su contrato responde a una «decisión política».

En este sentido, señaló que tanto ella como los otros dos anestesistas que denunciaron las filtraciones en la OPE esperaban «un castigo, y mi contrato era el más débil». «Lo más fácil era castigarme a mí», manifestó Macho, que puso en valor el trabajo realizado hasta la fecha para lograr que los procesos de selección de Osakidetza se rijan por los principios de igualdad y transparencia. «Tenemos claro que si luchamos juntos podemos lograr cosas. No podemos aceptar todo», subrayó.

Lakua no ceja en su empeño de personarse en proceso judicial

La consejera de Salud, Nekane Murga, indicó ayer que el Ejecutivo ha presentado esta semana un nuevo recurso –el segundo de momento– para poder personarse como parte perjudicada en la causa abierta por el Juzgado de Instrucción número 2 de Gasteiz, que investiga las irregularidades denunciadas en la OPE de Osakidetza.

En respuesta a las preguntas formuladas por la parlamentaria soberanista Rebeka Ubera durante el pleno de control, Murga señaló que «Osakidetza es la primera interesada en llegar hasta el final y culminar esta OPE con todas la garantías, por eso queremos estar personados».

Asimismo, afirmó que su departamento no comparte la posición de la magistrada Yolanda Varona, quien ha rechazado que el Servicio Vasco de Salud se pueda presentar como perjudicado por entender que «no se ha acreditado el perjuicio» sufrido por Osakidetza. Es más la jueza apunta a que Osakidetza puede ser la «responsable civil» de la manipulación de una convocatoria pública de empleo.

Una opinión compartida por Ubera, que denunció que el Gobierno de Gasteiz «intenta vender la idea de que Osakidetza no es la responsable. Pero señora Murga, ustedes son los responsables, no son los perjudicados. Y ya es hora de que asuman las responsabilidades que les corresponden y empiecen a hacer y resolver cosas».

«Intentan engañar a la ciudadanía para mantener un modelo clientelar basado en el miedo, en el engaño, en el chantaje y en una contratación fraudulenta. Y usted y el nuevo director se han dedicado a blindar el espacio de impunidad con nombramientos a las personas que pueden estar implicadas, y utilizando la política de contratación para que quede bien claro que el que se mueve, el que denuncia, la paga y se va a la calle», añadió la parlamentaria de EH Bildu.I.S.