Willian José fue el protagonista negativo de la victoria de la Real del domingo en Balaídos al exteriorizar su enfado tras ser sustituido por Alexander Isak con empate en el marcador y un jugador más que el Celta. Se retiró lentamente, recogió una botella de agua que le dio el médico y la tiró automáticamente al suelo enfadado y repitió el gesto después al sentarse en el banquillo con una rabia que le llevó a llorar ante la cámara de televisión.

Aunque alguno ha querido ver un enfado del jugador con su rendimiento en el partido, los gestos de Willian José demostraron más un malestar por volver a ser el primer sustituido por Imanol. Ha pasado de ser el referente claro del equipo utilizado habitualmente en casi todos los minutos en todos los partidos a convertirse en el que menos juega de los seis jugadores titulares más adelantados.

Desde que Imanol se hizo cargo del equipo en enero en el inicio de su segunda etapa en el banquillo hasta el final de la temporada, Willian José jugó completos diez partidos y no fue sustituido, sin mediar una lesión, nunca antes del minuto 80. A partir de ese instante fue cambiado en cinco partidos, en tres con ventaja en el marcador para recibir el aplauso de la grada, y otros dos con empate. Y solo fue suplente tras recuperarse de alguna de sus lesiones.

Dos partidos más de 75 minutos

Esta temporada tras el fichaje de Odegaard y de Isak solo ha jugado 75 minutos en los dos partidos que ha disputado completos en la primera jornada ante el Valencia y en la derrota de Sevilla. Ante el Mallorca fue el primer cambio en el minuto 63, el primero por decisión técnica en San Mamés en el 54, solo jugó 18 minutos ante el Atlético de Madrid, volvió a ser el primer cambio en Cornellá en el 65 a pesar de meter dos goles, como fue el primer sustituido ante el Alavés en el descanso tras sufrir una hemorragia nasal tras marcar otro gol. Tras jugar el partido completo en Sevilla volvió a ser el primer cambio ante el Getafe tras ser expulsado Diego Llorente en el minuto 57 y fue el segundo sustituido ante el Betis en el 74 tras su cuarto gol.

El domingo volvió a ser el primer cambio en Vigo a pesar de que Imanol tenía la opción, con uno más y empate en el marcador, de retirar a Zubeldia, con tarjeta, para evitar que el árbitro quisiera compensar la expulsión de Pape Cheikh. Eso le daba la opción de colocar a Merino de pivote más defensivo, a Oyarzabal en su posición y jugar con los dos delanteros juntos como hizo en Valencia y en Sevilla en los dos únicos encuentros que ha jugado completos sin que la entrada al campo de Isak, que también ha jugado todos los partidos, motivara su marcha.

Willian José no solo ve que juega menos. Ha dejado de ser la referencia del juego realista, que antes siempre le buscaba a la hora de dar una salida al inicio del juego desde atrás. Con la llegada de Odegaard la Real ha cambiado su forma de jugar, busca sistemáticamente al noruego y los pases entre líneas a Oyarzabal y Portu, que ha anulado a Januzaj y Barrenetxea, al renunciar a jugar con extremos. Eso también perjudica a Willian José porque es un rematador que agradece los centros laterales como el de su último gol tras un servicio de Joseba Zaldua.

Ni tan siquiera le permite usar más su juego aéreo, que le convertía en el jugador que defendía en zona en el balón parado rival para intentar despejarlo y disimular la debilidad defensiva de sus compañeros en esa faceta. También en ese sentido la llegada de Monreal ha mejorado mucho ese déficit y todo unido provoca que el delantero sea menos importante y su rabia.

Quiso quedarse en verano

El momento más duro de Willian José en la Real a nivel personal llega después de que quisiera quedarse y heredar el número 9 de Imanol Agirretxe este verano. Tampoco ningún equipo podía optar a afrontar el traspaso de un delantero que firmó el pasado año hasta 2024 y aceptó una cláusula de rescisión de 70 millones de euros dentro de esa voluntad de jugar muchos años en la Real.

En entrevista en Radio Euskadi previa al derbi de Bilbo, Willian José dijo en agosto antes del cierre del mercado que «ha habido alguna propuesta de Inglaterra y algo del Betis, pero como siempre digo, mi interés era seguir aquí. La Real lo ha dado todo por mí hasta ahora y tengo mucho que devolver a un club al que le tengo mucho cariño y respeto. Ojalá pueda seguir aquí mucho tiempo».

La Real se entrenó ayer a puerta cerrada y hoy volverá a hacerlo para preparar el partido de Liga que jugará mañana (19:00) en el Reale Arena contra el Levante.J.I.