El hecho de que ayer Martin Odegaard completase su primer entrenamiento con el resto del equipo tras sufrir un edema óseo en Vigo invita a pensar que el noruego puede ser de la partida en el Bernabéu. A su recuperación física se unen las ganas que tendrá el futbolista, cedido por el club blanco, de reivindicarse ante la que puede ser su afición en un futuro no muy lejano.

Tras ejercitarse con normalidad, al escandinavo le restarían dos sesiones más de trabajo antes de que la escuadra txuri urdin se desplace hacia la capital española. Su presencia en el once realista sería muy importante, dado que ahora mismo es uno de los jugadores más en forma y su inspiración vendría de perlas para un escenario tan complicado.

Aunque aseguró que «viene de antes y está controlado», los problemas que sufre Mikel Merino en su hombro podrían apartarle de la cita en el feudo merengue. El martes se le salió dicha articulación en la sesión preparatoria y estos dos próximos días resultarán claves para comprobar cuál es su evolución, dado que, junto a Mikel Oyarzabal, es el futbolista que más ha participado en lo que se lleva de temporada.

Estreno de Alguacil

El Bernabéu trae buenos recuerdos recientes, ya que fue donde se estrenó el técnico, Imanol Alguacil, la pasada campaña, obteniendo un positivo 0-2 de un campo en el que desde el último ascenso del cuadro guipuzcoano en 2010 casi siempre ha salido goleado, encajando 33 tantos en los últimos nueve ejercicios.

En lo que se refiere a la estadística histórica, la Real únicamente ha vencido en cuatro ocasiones en Liga en el campo merengue, dos de ellas en los últimos quince años. Es el segundo desplazamiento más adverso, por detrás del Camp Nou, donde solo ha obtenido tres triunfos.