Ortuzar y un calendario con recortes de prensa
El pasado sábado, 27 de junio, el responsable de política institucional del EBB, Koldo Mediavilla, escribía el artículo semanal en su periódico de referencia con una gran foto de Arnaldo Otegi que ocupaba media página y el título «La fuerza por la boca». En él decía en referencia al PP que «la organización más corrupta de Europa se ha permitido dar lecciones de moral pública a los jeltzales». A ello añadía que «a ese carro de la porquería se ha subido en marcha la izquierda patriótica. Pero esa ocurrencia no es nueva. Ya estuvieron en el pasado reciente a partir un piñón con la diputada de Vox Macarena Olona cuando la hoy azote ultra en el Congreso era Abogada del Estado en Euskadi de la mano de Carlos Urquijo». El burukide concluía que «la animadversión de ambos, de la Izquierda Abertzale y de Olona, hacia el PNV, les hizo ‘amiguitos’ de rebotica en procedimientos judiciales y en la divulgación de acusaciones públicas».
El domingo, 28 de junio, el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, acusaba a «la oposición» de «intentar poner palos en la rueda» del Gobierno de Urkullu.
El lunes, 29 de junio, el presidente del GBB, Joseba Egibar, afirmaba que ante una situación de crisis como la que hemos vivido, «se puede optar por una actitud constructiva o por una destructora», denunciando que «algunos han optado por esta última, por hacer daño». «Ahí se ha situado la estrategia político-sindical de la izquierda abertzale», concretó. «La oposición político-sindical de la izquierda abertzale no ha estado a la altura, ni muchísimo menos, de lo que exigía y que exige el momento. Han confundido deseos con realidad y han utilizado el virus, la pandemia, como elemento de destrucción electoral del PNV», concluyó.
El martes, 30 de junio, de nuevo el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, dijo que EH Bildu, Elkarrekin Podemos y el PP no hacían más que «propuestas-mentira, propuestas-fake, todos los días. He empezado a apuntar en un cuaderno todas las promesas que están haciendo. Al final de campaña haremos una suma de lo prometido».
Al arrancar julio, el miércoles 1, también era Ortuzar quien «mitineaba» que el «mal llamado ‘pacto de izquierdas’, anhelado por algunos», solo «esconde un pacto anti-PNV», y que sería «desastroso» para el país.
Y a renglón seguido, en el mismo acto, Andoni Ortuzar, presidente del EBB del PNV, afirmaba sin rubor que «somos los únicos que estamos haciendo la campaña sin meternos con los demás, presentando ideas y propuestas».