Resultado desigual para los equipos vascos en la cuarta jornada de Primera. El Eibar se reencontró con la victoria ante el Espanyol (0-1) gracias a un gol de Thembi; el Athletic volvió a ver cómo se le escapaba el triunfo en la recta final, esta vez en Valencia (1-1); y la Real se estrelló con la pegada del Madrid para encajar su primera derrota de la temporada (1-0).

Fue también una jornada de regresos y en este caso las buenas noticias fueron para todos. Arene, Nahikari, Garazi y Yulema disputaron sus primeros minutos de la temporada tras haber recibido el alta y De la Nava, Unzue, Erika o Lucía también volvían a vestirse de corto tras abandonar la hasta ahora atestada enfermería del Athletic.

En la Ciudad Deportiva Dani Jarque, el partido tuvo dos partes diferenciadas. Lo bueno es que sólo el Eibar acertó a marcar en la que dominó. Fue la primera, con el equipo intenso y concentrado como pedía su técnico. De hecho, el gol nació gracias a la combinación de esas dos virtudes con la presión alta: en el 19, Sheila robó un balón junto al área que, tras rechace de Dossey a tiro de la capitana armera, acabó convirtiendo en gol Thembi.

Para entonces, Aizpurua ya había mandado un balón a la madera. Después tocó sufrir, sobre todo en el segundo tiempo, con un Espanyol que buscó la remontada. Malena se salió pero, lamentablemente, tuvo que compartir el protagonismo con la lesionada Thembi y, sobre todo, Anair Lomba, evacuada en camilla tras sufrir un choque que se saldó con traumatismo craneoencefálico y pérdida de conocimiento. Por suerte, llegó al hospital consciente y orientada.

El Athletic, por su parte, vio cómo el triunfo se le escapaba por segunda semana consecutiva en la recta final del choque. Erika adelantó a las rojiblancas con un disparo raso y ajustado a cinco minutos del descanso pero Carla Bautista, que había entrado al campo en la segunda parte, restableció la igualada con un cabezazo en el minuto 78.

La Real, por último, se llevó la peor parte. Con la entrada de Etxezarreta e Itxaso por primera vez en el once, salió al césped con la misma buena pinta que en los partidos anteriores pero chocó con la pegada del Madrid. A ocho del descanso, Priscila Borja, que ya sentenció la jornada anterior en Unbe, aprovechó un balón de Maca para anotar el único gol del partido.

La única alegría para las donostiarras fue la reaparición de su capitana Nahikari en la recta final.