Mikel Auza Makutso
Miembro de Zainduz
KOLABORAZIOA

SOS Servicio de Atención Domiciliaria

Nuevamente la derecha «caciquil» y «camaleónica» del Ayuntamiento de Pamplona y sus máximos responsables, es decir; Enrique Maya y Maite Esporrín, quieren privatizarnos el Servicio de Atención Domiciliaria. Un servicio esencial cuya plantilla asiste y acompaña a nuestras personas mayores y dependientes, que ha realizado y realiza de forma excepcional su trabajo. Nos indican que el servicio se ha encarecido y acusa a la plantilla de no trabajar todas sus horas, pero no ponen soluciones a la ineficacia en el sistema informático a la hora de realizar los cuadrantes y otras malas gestiones que deben de mejorar. Lo más cómodo para ellos es privatizar el servicio y «milagro», se soluciona el problema.

No voy a explicar cómo la derecha, aunque tengan diferentes siglas, quiere privatizar todo lo público y cómo las empresas privadas de su misma «cuerda» son las que gestionan estos «golosos» servicios públicos. Más tarde, como no, aparecen las «puertas giratorias».

Lo que me preocupa ahora son las mujeres que trabajan en este sector, que son las principales personas perjudicadas que sufrirán recortes en sus salarios, empeorando sus condiciones laborales. Mi madre es usuaria de este servicio desde hace tres años y no tenemos más que palabras de agradecimiento para las trabajadoras que nos han atendido, añadiendo a esto toda la mala época de covid-19 que estamos viviendo. Con la privatización, no tendremos esta calidad de servicio y nuestras personas mayores y sus cuidadores y cuidadoras se verán perjudicados en esta asistencia.

Mientras tanto, la ciudadanía debemos padecer las malas gestiones del Ayuntamiento de Pamplona y que han supuesto pérdidas millonarias como la adjudicación a 75 años del parking de la plaza del Castillo, el Scalextric millonario de Marcelo Celayeta donde las villavesas se ven obligadas a invadir el carril contrario y un montón de malas gestiones más, donde las personas responsables de estos desaguisados no tienen nada que pagar al tener un colchón económico que pagamos toda la ciudadanía de Pamplona.

El 29 de abril las trabajadoras realizarán una huelga y, desde el corazón, me adhiero a todas las movilizaciones que realicen las trabajadoras para mostrar mi apoyo y solidaridad a un sector feminizado y perjudicado en el mundo laboral.