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SOCHI

Putin ofrece a Lukashenko el abrazo de Rusia frente al boicot occidental

El presidente ruso, Vladimir Putin, destacó que el proyecto de unión de Rusia y Bielorrusia «avanza con firmeza», tras reunirse con su homólogo bielorruso, Alexander Lukashenko, al que Moscú tiende la mano para rescatarle del boicot occidental. Lukashenko denunció las últimas medidas de la UE como intentos de desestabilizar el país.

Rusia mostró ayer un decidido apoyo a Bielorrusia frente a las sanciones y exclusión de las potencias europeas occidentales, tras el aterrizaje forzado de un avión comercial para detener al opositor Roman Protasevich.

El presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, se reunió con su homólogo ruso, Vladimir Putin, en Sochi, en un encuentro previsto con anterioridad sobre la integración económica de ambos Estados, pero que cobra ahora la relevancia de mostrar este respaldo en un momento de debilidad diplomática y económica que el Kremlin aprovecha. Putin aplaudió los «resultados concretos» del acercamiento con Bielorrusia. «Estamos construyendo una Unión fortalecida» entre Rusia y Bielorrusia, afirmó. «Avanzamos con firmeza en esta dirección (...) y este trabajo ya está dando resultados concretos para nuestra ciudadanía», añadió.

El proyecto de unión había ido languideciendo y suscitado recelos en Bielorrusia, pero el progresivo aislamiento desde Occidente empuja a Minsk al abrazo del oso ruso.

En Sochi, Lukashenko denunció el intento, por parte de la UE, «de desestabilizar la situación hasta los niveles de agosto del pasado año», en referencia a las protestas antigubernamentales, por cuya represión varios altos cargos y organizaciones bielorrusas ya son objeto de sanciones europeas. «Está muy claro lo que buscan nuestros amigos occidentales. Pero no hay alturas que los bolcheviques no hayan tomado. Y nosotros también las tomaremos», afirmó.

Putin coincidió con Lukashenko en que se trata de un nuevo «estallido de emociones» por parte de Occidente.

De hecho, las potencias occidentales arreciaron en su ofensiva. «El régimen de Minsk debe estar aislado a nivel internacional», afirmó el vicecanciller alemán, Olafa Sholz, a la vez que pidió a Rusia que le presione.

Pero para Moscú, el Gobierno bielorruso ha mostrado transparencia en el incidente aéreo y no tiene razones para dudar de su versión sobre el aviso de bomba a bordo. Sostiene que la UE ha mostrado un comportamiento «irresponsable que pone en peligro la seguridad de los pasajeros al pedir a las compañías aéreas que eviten el espacio aéreo bielorruso, petición que han secundado.

Los Veintisiete han excluido además a los aviones bielorrusos de sus espacios aéreos.

Varios vuelos de Air France y un trayecto de Austrian Airlines a Moscú han sido anulados porque Rusia no ha validado sus planes de vuelo que evitaban el cielo bielorruso.

El Kremlin aseguró ayer que la anulación respondió a motivos puramente técnicos –el aumento del número de peticiones de compañías aéreas– y que se solucionarán, pero en la UE creen que se trata de una respuesta a sus medidas.

La UE enviará una misión militar a Mozambique en tres meses

Los ministros de Defensa de los Veintisiete apoyaron en una reunión informal desplegar una misión militar en Mozambique, donde crece la actividad yihadista. La misión podría estar en el terreno en tres meses con la aportación de tropas de siete u ocho Estados, sobre todo de Portugal. Además, el representante de la diplomacia europea, Josep Borrell, dijo que la formación como la que la UE da al Ejército de Mali no se va a interrumpir porque un día «pueda haber» un golpe de Estado.GARA