GARA
KABUL

Los talibanes instan a las ciudades afganas a rendirse

Los talibanes preparan ya la toma de las ciudades de Afganistán tras hacerse con el control de amplios territorios rurales. Los insurgentes pidieron a sus habitantes su rendición y que negocien un acuerdo para evitar los combates. A la vez, advirtieron a Turquía, que prevé mantener tropas en el país para defender el aeropuerto de Kabul, de que lo consideran una ocupación y de que responderán a su presencia como a la de cualquier otra fuerza extranjera.

Los talibanes instaron a los habitantes de las ciudades a rendirse para evitar daños mayores, anunciando un nuevo paso en la gran ofensiva que iniciaron en mayo aprovechando la retirada de las tropas estadounidenses y de la OTAN, y en la que han tomado gran parte de los distritos del país. Ahora avanzan su intención de tomar también las capitales provinciales.

«Ahora que desde las montañas y los desiertos los combates han llegado a las puertas de las ciudades, los muyahidines no quieren luchar dentro de la ciudad», señaló Amir Khan Muttaqi, exministro de Información y Cultura del régimen talibán.

«Es mejor que nuestros compatriotas utilicen los medios a su alcance para ponerse en contacto y alcanzar un acuerdo sensato para evitar que las ciudades sufran daños», indicó Muttaqi. El llamamiento de los talibanes sigue la misma estrategia que usaron cuando conquistaron el poder en los años 90: rodear las ciudades y obligar a sus habitantes a negociar la rendición.

Los talibanes ya rodean varias capitales de provincia, mientras el Ejército afgano, sin el apoyo aéreo brindado por las tropas estadounidenses, no puede ofrecer una resistencia importante y solo controla en este momento las grandes ciudades y las carreteras principales.

El repliegue es tal que el negociador jefe del Gobierno, Abdullah Abdullah, tuvo que negar ayer que forme parte de un pacto con los insurgentes.

En las últimas semanas, varios distritos aledaños a Kabul cayeron en manos de los talibanes, lo que aumenta el temor sobre un posible ataque a la capital y a su aeropuerto, cuya defensa ha asumido Turquía cuando las otras fuerzas extranjeras dejen el lugar, en agosto.

Precisamente, los talibanes advirtieron ayer a Ankara de que su decisión «es desacertada, una violación de nuestra soberanía e integridad territorial y va en contra de nuestros intereses nacionales».

«Consideramos el mantenimiento de las tropas extranjeras en nuestra patria, independientemente del país o del pretexto, una ocupación y los invasores serán tratados como tales», añadieron los insurgentes.