Este próximo fin de semana arranca una nueva edición del Seis Naciones. No solo en categoría masculina absoluta, esa que se lleva los focos y las cámaras, sino también en categoría femenina y chicos sub-20.

Es en este último torneo, concretamente en la convocatoria de Irlanda, en la que entre los James, los Conor, los Ronan y los Adam vemos un nombre propio que no concuerda demasiado con el resto: Aitzol.

Hijo de un irlandés y una vasca –su madre Amaia es de Bilbo, su tía Alaitz acaba de ser nombrada directora de Zinegoak–, Aitzol King Arenzana es un ala con una planta impresionante, 190 centímetros de estatura y 95 kilos de peso.

«Estando aún ‘en construcción’ tiene un gran futuro por delante», comenta a NAIZ Iñaki Laskurain, expresidente de la Federación Vasca de Rugby, residente en Dublín y amigo de la familia, con la que comparte frecuentemente tardes de balón ovalado, pintas de cerveza y tortilla de patatas.

Aitzol, junto con sus hermanos Kealan e Iker –son trillizos–, se ha criado deportivamente en la cantera del Balbriggan RFC, un modesto club de una localidad de 22.000 habitantes ubicada en la costa este de la isla esmeralda, unos 30 kilómetros al norte de Dublín.

Sus prestaciones ya han llamado la atención de Leinster, el principal club de la capital y uno de los más importantes de Europa, siempre candidato a ganar la United Rugby Championship –antes Guinness Pro14– y la Champions Cup, y con cuyas categorías inferiores ya ha debutado.

El pasado diciembre se estrenó con la camiseta verde del trébol en un amistoso contra Italia, vistiendo el número 11 y anotando el único ensayo de su equipo. Su imagen ocupó la primera página de la sección de Deportes en la prensa local. En ella se aprecia claramente el tatuaje de un ‘lauburu’ en la parte interior del antebrazo derecho, un distintivo que también portan sus hermanos.

En la primera jornada de este Seis Naciones 2022, el combinado de Irlanda comenzará recibiendo al de Gales este viernes por la noche. Una semana más tarde le tocará visitar a Francia. La presencia de King sobre el césped puede ser un aliciente más para seguir a una selección que ya goza de bastantes simpatías por estos lares.