El presunto autor del tiroteo, un joven blanco de 18 años identificado como Payton S. Gendron, llegó a las 14.30 horas del sábado (hora local) al aparcamiento de un supermercado en Búfalo (Nueva York). Tras bajarse del vehículo muy fuertemente armado, con equipo táctico y empezar a transmitir en vivo –a través de la plataforma Twitch– lo que estaba a punto de hacer, disparó a cuatro personas.

Después se adentró en el supermercado y logró abatir a un guardia de seguridad para luego continuar disparando en el interior hasta llegar a 13 personas, 11 de ellas negras. Diez de ellas fallecieron en el acto.

Varios oficiales de la Policía de Búfalo lograron arrestarlo y ha sido acusado de asesinato en primer grado, que es el cargo más alto en el estado de Nueva York, y lleva consigo una sentencia de cadena perpetua sin libertad condicional.

«El gran reemplazo»

La Policía de Búfalo ha distribuido una carta de 180 páginas –que se cree que fue escrito por el sospechoso– en la que se describe una teoría conspirativa conocida como «el gran reemplazo», por la cual se afirma que las élites políticas utilizan la inmigración para reducir la población blanca, según informó el diario “The Wall Street Journal”.

El manifiesto reconoce como inspirador a Brenton Tarrant, el autor de la matanza de Christchurch (Nueva Zelanda), así como a Anders Breivik, autor confeso de la matanza de Utoya (Noruega) en 2011.

El supremacista blanco Brenton Tarrant irrumpió el 15 de marzo de 2019 en dos mezquitas de Christchurch, y masacró a más de medio centenar de personas de religión musulmana que estaban rezando e hirió a otras cuarenta.

El presidente de EEUU, Joe Biden, mostró ayer su apoyo a las familias de las víctimas cuyas vidas «han sido arrebatas sin sentido», y agradeció «la valentía» de la Policía. «Cualquier acto de terrorismo doméstico, incluso en nombre de una repugnante ideología nacionalista blanca, es la antítesis de todo lo que representamos en EEUU», aseguró. «Debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para acabar con el terrorismo interno alimentado por el odio», añadió.

Una larga lista

Lo cierto es que esta masacre racista es, por el momento, la última de una larga y trágica lista. El 3 de agosto de 2019 un ultraderechista de 21 años mató a 23 personas, entre ellas ocho mexicanos y latinos en El Paso, Texas.

El 17 de junio, un supremacista blano mató a nueve fieles negros en una iglesia de Charleston, en Carolina del Sur.

En ambos casos, los asaltantes también emitieron simultáneamente los tiroteos a través de las redes en internet.