El centro de Quito fue escenario ayer de nuevos disturbios por los enfrentamientos entre manifestantes y policías durante el noveno día consecutivo de las protestas convocadas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) contra el Gobierno del presidente Guillermo Lasso por la carestía de la vida, entre otras cuestiones. Las protestas dejan ya un manifestante fallecido al precipitarse desde una gran altura cuando intentaba refugiarse de los gases lacrimógenos lanzados por la Policía. Además, hay 61 heridos, 18 de ellos de gravedad, y 86 detenidos, según el balance de organizaciones de derechos humanos.

Estos altercados ocurrieron cuando grupos de manifestantes trataron de llegar al parque El Arbolito, epicentro de las protestas que paralizaron el país durante diez días en octubre de 2019 y que dejaron un una decena de fallecidos.

Las fuerzas de seguridad tomaron el domingo la Casa de la Cultura Ecuatoriana, anexa al parque, para evitar que, como en 2019, albergase a los miles de indígenas llegados de todo el país para manifestarse en Quito, desafiando el estado de excepción decretado en seis provincias, entre ellas Pichincha, donde está la capital. Ayer se cortaron numerosas carreteras que obligaron a suspender servicios.