Manex ALTUNA
BILBO
Elkarrizketa
MIKEL VESGa
Jugador del Athletic Club

«La propuesta de Valverde es atrevida y está funcionando bien»

Desde mediados de la temporada pasada, Mikel Vesga (Gasteiz, 1993) se fue asentando en las alineaciones con Marcelino y hasta llegó a marcar dos goles contra Levante y Cádiz. En este inicio de curso ha sido uno de los fijos en el nuevo esquema implantado por Ernesto Valverde en medio campo junto a Sancet y Muniain.

Mikel Vesga recaló en Lezama con 21 años, procedente del filial del Alavés y tras pasar también por el Aurrera de Vitoria. Después de dos campañas en el Bilbao Athletic, Valverde le hizo debutar en 2016. Sin embargo, tuvo que salir cedido al Sporting y al Leganés en Primera para regresar y hacerse un hueco en la plantilla.

Con contrato hasta 2024, está disfrutando de su mejor momento de forma a los 29 años. El miércoles entrenó en solitario por una ligera sobrecarga muscular, pero espera estar disponible para la visita de esta jornada al Elche, un rival en horas bajas. El Athletic necesita volver a la senda de la victoria para mantenerse en los puestos que dan acceso a jugar en Europa, objetivo marcado por el club tras un lustro sin lograr la clasificación.

¿Qué sensación tiene el equipo tras la derrota en la última jornada ante el Espanyol?

La primera derrota siempre duele, y si es en San Mamés, más todavía. Queríamos alargar la buena racha que traíamos con siete puntos en tres partidos y creo que el equipo hizo lo suficiente para poder ganar el partido. Se llevaron la victoria por un error en una jugada puntual que tendremos que corregir, pero también sacamos cosas positivas.

¿Considera que pudo ser el partido más flojo en lo que va de temporada?

En cuanto a ocasiones puede que sí. No probamos tanto al portero como ante Mallorca, Valencia o Cádiz. A nivel de juego hemos rendido de forma similar, ya que llegamos con claridad al área. El equipo suele estar bien colocado y recupera rápido el balón. Lo más difícil en el fútbol es hacer goles cuando el rival se mete atrás. Faltó ese último pase o desmarque para generar oportunidades más claras.

La principal novedad que ha introducido Valverde en el dibujo del equipo es la apuesta por un triángulo en medio campo con Sancet, Muniain y usted por detrás.

Me parece que es una propuesta atrevida al jugar por dentro con dos futbolistas ofensivos que les gusta tener el balón. Nos estamos asociando bien para llevar la pelota a campo rival. Con la calidad que tienen Sancet y Muniain es fácil jugar con ellos y darles el balón. Además, se están entendiendo entre ellos y la apuesta está funcionando bien.

¿Cómo se encuentra en ese nuevo rol de ancla?, ¿hay mucha diferencia entre lo que le pide Valverde con respecto a Marcelino?

Conozco la demarcación. Jugué en ese puesto durante la cesión en el Sporting y estuve muy a gusto. Aunque llevaba tiempo sin jugar en esa posición en el medio campo, estoy disfrutando y me encuentro muy cómodo. El hecho de jugar yo solo hace que no me acerque tanto al área y en tareas defensivas los movimientos son algo diferentes. Marcelino obligaba mucho más a jugar para adelante buscando a los atacantes tras robar la pelota y Valverde pide más calma y dar algún toque más.

Debutó en 2016, pero le ha costado hacerse un sitio en las alineaciones. Tuvo que salir cedido y esta campaña es uno de los imprescindibles.

Diría que practicamente todas las temporadas he empezado en el banquillo o sin jugar. Es el primer año que empiezo como titular. Las cesiones me vinieron bien. En Gijón apostaron por mí desde el primer día y me vi capaz de jugar en Primera. El año con Ziganda jugué algo más, pero fui alternando y acabe sin jugar. Necesitaba salir, sentirme importante. Se valoró con el club y tomamos la decisión correcta de ir al Leganés porque salió todo bien. Este es el año que más he jugado, pero esto es muy largo y voy a intentar ser lo más regular posible para poder mantenerme ahí.

A partir de las eliminatorias de Copa de la temporada pasada contra Barcelona y Real Madrid dio un paso adelante, ¿cómo explica ese crecicimiento?

Yo también me lo pregunto a veces. No hay una respuesta fácil. Los primeros seis meses de la temporada pasada sufrí mucho al no jugar demasiado y sentir que las cosas no salían como uno quiere. El hecho de jugar esos partidos de titular, hacerlo bien y que el equipo responda, me dio un extra de confianza. A partir de ahí, vino un cambio en la mentalidad.