Cuatro meses y 19 días han pasado desde que la Real se impusiera al Rayo Vallecano en Zubieta para asegurar la primera participación de su historia en la UEFA Women’s Champions League. Dos semanas más tarde confirmaba el subcampeonato liguero y la clasificación para la segunda ronda del torneo continental. Hoy, en un escenario de lujo y ante un rival de campanillas, disfruta de su recompensa, que le plantea un nuevo reto.

Las txuriurdines ya han demostrado, y se han demostrado, que son capaces de competir al máximo nivel en la Liga. Ahora quieren saber qué lugar ocupan en la mejor competición del mundo por clubes. Y la primera prueba la afrontarán hoy en el Reale Arena (19.00, ETB1/DAZN/RSTV) con un examinador de primer nivel. Un Bayern de Munich que, como recuerda Maddi Torre, «ha sido segundo en la Liga, como nosotras» pero que, hasta que se demuestre lo contrario, está un escalón por encima del equipo donostiarra. Por capacidad económica, por palmarés -tres Ligas y una Copa-, por experiencia en el propio torneo -siete participaciones previas con las semifinales de 2019 y 2021 como techo- e incluso por nombres, en una plantilla en la que se cuenta casi una decena de finalistas de la pasada Eurocopa, incluyendo a la campeona Georgia Stanway.

Natalia Arroyo no tiene reparos en concederles el papel de favoritas pero recuerda que «hay diferencias entre que lo seas y que pases» y está convencida de que, pese a considerar al Bayern «uno de los grandes de Europa», la Real puede superar la eliminaoria.

Para conseguirlo, o al menos para inclinarla hoy de su lado, el equipo debe buscar «su mejor versión» ante un rival con el que tiene «similitudes, salvando las distancias». «Cuida mucho la posesión de balón, intenta iniciar de manera controlada, alterna corto-largo y fuera-dentro, tiene capacidad para mezclar mucha gente por espacios intermedios, tiene dinamismo, juega muy bien al especio, es muy fuerte al contragolpe, tiene muchos recursos... Pero cada vez que te digo algo veo a mi equipo representado. Vamos a ver quién es más fuerte cuando toque en cada fase. Tienen muchas armas pero la parte buena es que creo que nosotras también», subraya la entrenadora blanquiazul, que concede mucha importancia al «inicio del partido» y reconoce que el aspecto físico puede resultar determinante en dos partidos en los que «vamos a ver cuánto de cerca o de lejos estamos de los grandes de Europa».

También cree Nerea Eizagirre que, pase lo que pase, «sacaremos cosas buenas de este partido, veremos dónde estamos y dónde queremos llegar». «Pero no descartamos ganar aquí y hacer un buen partido allí», avisa la capitana, que recuerda que apostó por seguir en la Real para «vivir experiencias como ésta» y que resume el sentir del vestuario en dos palabras «ilusión y ganas». «Queremos que llegue ya el partido. Veo muy lejos las siete del martes, jugaría ahora mismo. Queremos ver en qué nivel estamos -insiste-, nos gustan estos retos y además está claro que nos gusta ganar. Sabemos que no será fácil pero tengo toda la confuanza en el equpo y estoy segura de que tendremos opciones».