Iratxe FRESNEDA
Docente e investigadora audiovisual

Me importa un bledo

S intiéndolo mucho” es un documental dirigido por Fernando León de Aranoa, tras poder acceder durante trece años a un material privilegiado para poder llevarlo a cabo. Dicen que en la película fuma y bebe en exceso y, por lo que leemos, se siente cómodo virando hacia la derecha. A pesar de las malas críticas que ha recibido el trabajo de Aranoa, merece un visionado y no precisamente porque haya sido admiradora de Sabina ni del tipo de masculinidad que transmitía en su juego de estrella. Precisamente ese juego inunda estos días el ambiente en las redes y, diría, las calles. Para que el mundial de Catar sea una realidad, el proceso de construcción se ha llevado por delante todos los derechos humanos que podamos conocer. Las extorsiones, las muertes por explotación y la falta de seguridad laboral son parte de un demasiado largo etcétera. Pero el espectáculo será retransmitido, ya se sabe que el espectáculo debe continuar, y esclavos de todo el mundo lo verán y nadie pensara en el costo humano (o ecológico). Seguiremos el minuto y resultado, los gladiadores multimillonarios correrán, darán patadas a un balón y, después, saldrán del estadio en coches de lujo rumbo a fiestas privadas. Mientras, los parias limpiarán sus desechos y arreglarán los desperfectos dejados por el camino. ¿Qué pasaría si despertáramos del letargo? ¿Qué sucedería si empatizáramos con las familias de los seudoesclavos muertos mientras construían los estadios? Vivimos en la distopía del «sintiéndolo mucho», querida, a mí me importa un bledo.