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El Athletic pierde a Txetxu Rojo, su segundo jugador con más partidos

El extremo izquierdo de Begoña falleció ayer a los 75 años y el club rojiblanco se queda sin uno de sus emblemas, un «one club man» que militó entre los años 1965 y 1982, disputando un total de 541 encuentros con la equipo vizcaino, ganando dos Copas.

Txetxu Rojo posa en su etapa de entrenador del Athletic bajo el arco de San Mamés, dos símbolos del club.
Txetxu Rojo posa en su etapa de entrenador del Athletic bajo el arco de San Mamés, dos símbolos del club. (Luis JAUREGIALTZO | FOKU)

José Francisco Rojo Arroita, más conocido como Txetxu Rojo (Bilbo, 1947), falleció ayer a los 75 años de edad. El histórico exjugador del Athletic defendió durante 17 temporadas la camiseta rojiblanca desde que debutase con 18 años con el primer equipo en 1965 y hasta su retirada en 1982. «En un club plagado de leyendas, se nos va una de las más grandes, un auténtico mito rojiblanco, con una trayectoria fabulosa en la centenaria historia del Athletic. Una zurda de seda, puro ingenio en el pase y centro al área. Un 11 inolvidable», indicó el club rojiblanco en una nota.

El extremo izquierdo es el segundo jugador que más partidos ha disputado con la camiseta del equipo rojiblanco (541), por detrás de otras de las grandes leyendas de la entidad, José Ángel Iribar (614). Jugador zurdo y de mucha clase, durante su trayectoria como futbolista del Athletic marcó 68 goles y logró los trofeos de Copa de las temporadas 1968-69 y 1972-73. Asimismo, se quedó a las puertas de ganar la Copa de la UEFA en la temporada 1976-77, en la final perdida ante la Juventus. Tras su retirada en 1982, recibió un homenaje de despedida en un encuentro entre el Athletic y la selección inglesa, del que se cumplieron 40 años en marzo.

GRAN HUELLA

Pero la huella que Txetxu Rojo deja en el Athletic Club es «inmensa y va mucho más allá del fútbol. En torno a su pierna izquierda prodigiosa, su talento creativo y su clase deslumbrante se erigió un ídolo que marcó toda una época y cuyo eco perdura inalterable entre los athleticzales. Los relatos sobre la elegancia suprema y la técnica portentosa de Rojo I en la banda izquierda se han transmitido entre generaciones de manera espontánea, como perduran en la memoria colectiva el recuerdo de los seres queridos y los grandes mitos», añadió la entidad de Ibaigane.

Asimismo, recordó que fue «un hombre de Club con mayúsculas, 100% Athletic, que, una vez retirado, entrenó al equipo en 70 partidos oficiales, en las temporadas 1989-90 y 2000-01, sin el mismo éxito que tuvo como jugador, pero con igual dedicación y entrega al club de su vida». En esta segunda etapa, Ernesto Valverde fue su ayudante.

Entrenó, asimismo, a Celta, Osasuna, Lleida Esportiu, Salamanca y Real Zaragoza, en dos etapas diferentes. Uno de los mayores éxitos de Txetxu Rojo como entrenador fue con el equipo vigués, a quien metió (temporada 1993-94) en su tercera final de la Copa de las cuatro que ha disputado. No obstante, se tuvieron que conformar con el subcampeonato ante el Real Zaragoza.

Precisamente, el mito rojiblanco tomó las riendas del conjunto maño en la temporada 1998-99 y un año después realizó una temporada «inolvidable» que hizo soñar a su afición con el título de Liga.

Su hermano pequeño, Rojo II, centrocampista, también desempeñó parte de su carrera en el Athletic Club durante siete temporadas, entre 1971 y 1977. Fue en ese último año, precisamente, cuando el equipo entrenado por Koldo Aguirre quedó subcampeón de Copa y UEFA, con aquella histórica final ante la Juventus. Para entonces, ya había retrasado su posición al interior para dejar una puerta abierta a su heredero, Estanis Argote.