Joseba ITURRIA
REAL

Repetir los cambios de Cornellá conduce a perder dos puntos en superioridad

Imanol introdujo en los últimos minutos a los cinco jugadores que entraron el lunes en un final que estuvo a punto de estropear un gran partido. El Celta fue capaz de generar tres opciones en el tiempo añadido en inferioridad para empatar en el minuto 93.

Mikel Oyarzabal celebra el gol marcado en el inicio del encuentro.
Mikel Oyarzabal celebra el gol marcado en el inicio del encuentro. (Gorka RUBIO | FOKU)

Imanol repitió ayer los mismos cinco cambios que introdujo ante el Espanyol, la única diferencia fue que salió Kubo en lugar de Oyarzabal, y la Real volvió a venirse abajo en los últimos minutos. Si el lunes salvó los tres puntos porque llevaba un 0-3 favorable, ayer el Celta lo aprovechó con diez para crear tres ocasiones en el tiempo añadio y empatar en el minuto 93 en un centro de Iago Aspas que Le Normand desvió a su portería.

Fue una jugada desgraciada que premió a un Celta que lleva muchos menos puntos de los que le corresponde por su juego y por lo que hacen sus jugadores entre las dos áreas y castigó a una Real que perdió el control del partido en el segundo tiempo y se descompuso con los cambios finales.

Si Imanol repitió el mismo equipo de Cornellá es porque ahora están mejor los que empiezan los partidos que los que los acaban. Hasta Merino no se encuentra al nivel de Illarra. Como bien dijo Imanol, cuando alguien se baja del tren y está un mes sin jugar cuesta volver a coger la velocidad. Le ha costado subirse al capitán y le pasa lo mismo al navarro, pero el problema fue introducir cuatro cambios a partir del minuto 82 y que suban al tren en marcha jugadores que están fríos. Los cambios son para mejorar y no pasa nada por acabar un partido sin hacerlos.

La Real no empezó bien el segundo tiempo y concedió ya en los primeros seis minutos dos claras ocasiones a Carles Pérez, la segunda tras un intento de cesión de Diego Rico que superó a Remiro y dejó al portero por detrás del balón y del delantero con la fortuna de que cabeceó al poste.

Tampoco acertó la Real a tener el control del juego y permitió que en el segundo tiempo el partido estuviera abierto cuando le interesaba parar el ritmo e imponer la calidad de sus jugadores más adelantados como hizo en la primera mitad sin crear ocasiones.

GOL EN LA PRIMERA OPCIÓN

Solo tuvo en todo el primer tiempo la del gol tempranero de Oyarzabal, propiciado por una recuperación de Brais, un buen pase de Kubo y una pésima actuación de Iván Villar. Pero ese control permitió que el Celta apenas inquietara antes del descanso en un cabezazo tímido de Larsen controlado por Remiro, que también desbarató una clara opción del noruego en una jugada mal anulada por fuera de juego.

El partido estaba en el primer tiempo donde le interesaba a la Real, pero no le favoreció al ir por delante el intercambio de golpes del segundo, con dos remates de Kubo, al que le falta acertar con el remate más, y uno de Oyarzabal que Iván Villar desbarató bien antes de que Iago Aspas se plantara solo ante Remiro, que desvió el balón a corner.

La expulsión de Renato Tapia en el minuto 74 parecia ser la puntilla para el Celta, pero la Real no aprovechó su superioridad numérica para marcar el 2-0 y se descompuso con los cuatro cambios de los últimos minutos. Una pérdida de Pablo Marín casi la aprovecha Iago Aspas para marcar desde 40 metros en el tiempo añadido y el Celta adelantó líneas para buscar el empate. Óscar no aprovechó una buena opción, pero un centro del capitán vigués lo desvió Le Normand para llevar al marcador un empate que hizo justicia porque la Real no mereció ganar.

Imanol: «Ha sido justo»

Imanol se mostró tras al empate «dolido por los jugadores y por la afición. El Celta ha hecho méritos más que suficientes para empatar. Ha habido dos buenos equipos y ellos han tenido sus oportunidades antes de lograr el empate. Hemos tenido opciones de hacer el 2-0 y encajar un gol con uno más duele, pero ha sido justo. Hemos tenido claras ocasiones, pero ellos también. Hemos cometido errores que habitualmente no cometemos, sobre todo con uno más».

Preguntado por la poca aportación de los cambios, dijo que «ha sido así visto el resultado y el rendimiento de algunos, pero después de visto, aunque si quitamos esos 30 segundos estaríamos todos contentos».

Sobre los cinco puntos no sumados en Anoeta en los dos últimos partidos apuntó que «así es el fútbol. Pese a estar abajo, el Celta tiene grandes jugadores y no es sorpresa que hayan jugado un partido así. Fuera estamos sacando más puntos y es una pena porque, a pesar de no hacer un buen partido, los aficionados han estado con nosotros, han visto que teníamos necesidad y por eso siento más pena». J.I.