El arranque de legislatura por parte de la alcaldesa de Iruñea, Cristina Ibarrola (UPN), está generando «hartazgo» en el PSN, según admitió ayer en Radio Euskadi María Chivite. Desde el PP, la víspera, Sergio Sayas consideró posible una moción de censura.

El diputado del PP salió el martes a la palestra para exponer la tesis de una moción de censura contra la derecha en el Ayuntamiento de Iruñea y la ubicó dentro del proceso de negociación para la investidura de Pedro Sánchez. Con ello, probablemente, quería cortocircuitar esa opción, pero el efecto parece haber sido el contrario. Preguntada ayer en Radio Euskadi por esta hipótesis, la líder del PSN y presidenta del Ejecutivo navarro, María Chivite, no ocultó que en su partido hay «hartazgo» con la actitud de Ibarrola en estos primeros tres meses de legislatura.

La alcaldesa de UPN, que llegó al cargo por la negativa del PSN a apoyar la candidatura de Joseba Asiron (EH Bildu), ha protagonizado varias polémicas que Chivite atribuye a falta de conciencia de que «no tiene mayoría absoluta».

«Lo que me trasladan desde el grupo del PSN es una situación de hartazgo. No hay un ambiente positivo. Esa no es la manera de gobernar», dijo Chivite sobre Ibarrola. Entre otras cosas, la lehendakari navarra destacó la paralización de proyectos anteriores, así como decisiones tomadas sin disponer de mayoría para ello en el Pleno.

Hace días, la portavoz del PSN en el Consistorio, Elma Saiz, ya habló de situación «insostenible» con el Gobierno de Ibarrola por «los vaivenes y la inseguridad jurídica» en sus decisiones. Y añadió que, pese al escaso tiempo transcurrido entre junio y septiembre, «se nos está acabando la paciencia».

La derecha solo cuenta en el Ayuntamiento de Iruñea con 11 votos sobre 27 (9 de UPN y 2 del PP). EH Bildu dispone de 8 ediles, el PSN de 5, Geroa Bai de 2 y Contigo-Zurekin de 1. Ya la pasada legislatura Enrique Maya (UPN) gobernó en minoría, lo que se tradujo en que no pudiera aprobar los presupuestos.