GARA
SEGUNDA

Un gol de penalti deja aún más hundido al Amorebieta

Lezama vivió ayer un duelo de mucha intensidad, ya que tanto Amorebieta como Huesca, ambos en la pelea por salir de la zona baja de la tabla de Segunda, se jugaban muchísimo. Finalmente fue el equipo visitante quien se llevó los tres puntos y la tranquilidad gracias a una jugada de penalti en el minuto 60 y expulsión de Seguín -al intentar evitar bajo palos un gol despejando con la mano- que aprovechó Samu Obeng para sentenciar el encuentro desde los once metros.

Los oscenses se quedan por encima del Amore, que alarga su mal momento a ocho encuentros sin ganar.

La única jugada relevante del primer tiempo fue la que en principio supuso el primer tanto del partido y que se quedó en la primera tarjeta amarilla. La intervención del VAR dejó en falta de Obeng el tanto de rebote del ghanés en una disputa con Morán en la que, tras beneficiarse del rebote al salirle el balón hacia portería, pisó al local. En la segunda parte, el penalti desequilibró la balanza.