Joseba ITURRIA

ELKAR KIROLAK Y BAQUÉ DAN UN PASO ATRÁS PARA MANTENER SU ESENCIA

El mánager del equipo más antiguo del ciclismo desde su creación en 1978, Javier García, ha decidido no seguir en el campo amateur ante la imposibilidad de pelear con los filiales de equipos profesionales, pero no descarta regresar con el apoyo del Movistar para atraer a juniors con opciones reales de llegar al World Tour.

La última plantilla del Baqué, con Javier García en el centro de la fila inferior, y la otra histórica de 1981, de la que once de sus quince ciclistas pasaron a profesionales, con Julián Gorospe sexto por la derecha.
La última plantilla del Baqué, con Javier García en el centro de la fila inferior, y la otra histórica de 1981, de la que once de sus quince ciclistas pasaron a profesionales, con Julián Gorospe sexto por la derecha. (BAQUÉ-ELKAR KIROLAK)

El Café Baqué y Elkar Kirolak, la sociedad que lo ha impulsado en las últimas décadas, han decidido dar un paso atrás y sacar equipos juveniles para dar salida a chavales de su cantera y a jóvenes con opciones de llegar al World Tour con el acuerdo con Movistar que le ayudará a mantener la esencia que le ha permitido pasar a profesionales a más de un centenar de ciclistas.

Su mánager Javier García ha decidido no seguir tras 45 temporadas como referente en la categoría ante la imposibilidad de competir con los filiales Laboral Kutxa, Finisher, Caja Rural, Eolo y Aluminios Cortizo. Explica a GARA que tras 23 años en la estructura que aglutina a los clubes de Berango, Erandio y Leioa, que van a tener en 2024 a 50 chavales en escuelas, nueve cadetes, quince juveniles y ocho chicas, «no me gustaba lo que estaba viendo en el ciclismo amateur. No estoy aquí malgastando un dinero y mucho tiempo para no poder luchar contra los equipos filiales».

Javier García añade que «sabías que ibas a una carrera a hacer el quinto, aunque Álex Díaz fue tercero en Santikutz, porque no tienes un equipo de 20, con cinco o seis de nivel. No es que quiera ganar, pero no podemos pelear por nada. Y un equipo con la historia de Baqué debe transmitir ilusión. Planteé en el club que no iba a seguir así por si alguno quería hacerlo, yo encantado de apoyar un equipo que dé salida a los chavales, pero nadie quiso. Me gustan equipos como el Zabalgarbi y les ayudo. Me pidieron una baca y les di dos, unos botellines y les di una caja entera. Pero yo no quiero seguir así».

Por eso decidió ir a donde el patrocinador más fiel al ciclismo, «a decirle que no quería seguir con el equipo amateur y que mi idea era dedicarme a las escuelas, a los cadetes y juveniles y que íbamos a sacar un equipo junior que no teníamos este año con todos los chavales nuestros. Les gustó la idea y les dije que iba a intentar dar un paso más y hacer algo mejor».

Así se puso en contacto con equipos del World Tour para presentarles su proyecto y tuvo una buena acogida. De todos los que estaban dispuestos a trabajar conjuntamente con Elkar Kirolak la empresa Baqué y él decidieron unirse a Movistar, que también comenzó en el profesionalismo con un equipo amateur como vivero por el que pasaron sus ganadores del Tour, Pedro Delgado y Miguel Indurain, antes de disolverlo porque otro, Carlos Sastre, pasó a profesionales con ONCE.

BUENA SINTONÍA CON MOVISTAR

MOVISTAR ES UNA DE LOS POCAS ESTRUCTURAS SIN FILIAL Y LE PLANTEA PROBLEMAS PORQUE LOS MEJORES JUNIORS PASAN YA DIRECTAMENTE. POR ESO JAVIER GARCÍA NO DESCARTA VOLVER A DAR UN PASO ADELANTE: «LAS NEGOCIACIONES CON MOVISTAR HAN SIDO A TRAVÉS DE SEBAS UNZUE, HASTA QUE AL FINAL HABLÉ CON SU PADRE, EUSEBIO, Y EL CEO, MIGUEL GRÁVALOS, Y DE MOMENTO NO TRATAMOS ESO. POR AHORA VOY A DAR UN PASO ATRÁS E IGUAL DENTRO DE DOS AÑOS HAY QUE DAR OTRO ADELANTE Y SACAR UN EQUIPO SUB'23. NO LO DESCARTO».

Javier García destaca que «este año hemos corrido en Italia el Giro de Friuli y allí estaban los equipos de desarrollo de Alpecín y Jumbo. La mayoría de los World Tour y Pro Team los tienen y llegará un momento que van a fichar a los mejores juveniles. Me da miedo que, como con el fútbol, empiecen a fichar chavales de 16 años para subirlos a profesionales y a algunos les salga mal y acaben hundidos».

El primer Baqué junior que va a llevar en 2024 la M de Movistar en el maillot y material del equipo del World Tour, como las bicis Canyon, estará formado por los chavales de la cantera. Por ahora, el único que ha llegado desde el MMR es, Marco Martín, ganador del Txuma cadete, carrera internacional que organiza Elkar Kirolak, que mueve 400 personas en la organización y tiene sesenta peticiones de invitaciones para el próximo año.

«Movistar no me ha pedido nada -explica Javier García-. Este año es de transición. Solo nos ha venido Marco porque su hermana corre con nosotros desde hace dos años. Se enteró de lo que íbamos a hacer e intentaremos ayudarle. Ha querido venir. No me he movido para fichar chavales, no voy a ir a quitar a nadie de otro equipo. Hemos decidido salir con chavales que teníamos en Elkar Kirolak, anden o no, para que disfruten y no se metan en otras cosas y lleven una vida sana. Es la filosofía del club».

A partir de ahí entiende que «Movistar sí nos puede traer corredores buenos que tengan la posibilidad de pasar al World Tour, pero no seis para prescindir de cuatro de los que tenemos. Con el equipo nos planteamos lo que hacíamos con el aficionado, salir al extranjero a correr carreras para que cojan esa experiencia y todas las Vueltas del Estado».

La colaboración con Movistar no se limita a los chicos y así ha llegado a través del equipo del World Tour la navarra Paula Ostiz, que lo ha ganado todo en la categoría cadete a nivel estatal. Iñigo Larrucea será el director del equipo junior y Diego Pérez el encargado de la coordinación: «Tengo 64 años y debería ser mi sustituto». Con su claridad Javier García consigue atraer a personas de ciclismo y así tiene como ayudante de lujo a Marino Lejarreta, leyenda del ciclismo vasco, que ha ejercido como director del último equipo amateur, como Rubén Gorospe.

DOS AÑOS EN EL PROFESIONALISMO

El de Mañaria fue uno más de los corredores que dieron el salto con un equipo Baqué que llegó a competir dos años en el campo profesional en 2003 y 2004 ante la cantidad de ciclistas con posibilidades que no podían pasar. Esos dos años, gracias a ese equipo, dieron el salto diecisiete corredores, con David López, que acabó como gregario de Froome en el World Tour tras una dilatada carrera profesional, Aitor Galdos, Mikel Gaztañaga y Aitor Hernández entre ellos. El colombiano Félix Cárdenas ganó la etapa reina y la montaña en sus dos presencias en la Vuelta y en la primera acabó octavo en la general.

Julián Gorospe fue junto a Mikel Ugartemendia, que luego ganó tres Conchas como remero de San Juan, y Alejandro Ibáñez de Gauna el primero que pasó a profesionales desde Baqué en 1982, tras formar parte el año anterior de un equipo histórico en el que once de los quince integrantes dieron el salto. Además ascendieron Sabino Angoitia y Alfonso Gutiérrez en 1983, Rubén Gorospe, Alberto Leanizbarrutia y Juan Tomás Martínez en 1985, Ramón González Arrieta en 1990, David Etxebarria en 1995, Ricardo y Javier Otxoa en 1996 y 1997, Joseba Beloki y Pedro Horrillo en 1998 y el campeón mundial Igor Astarloa e Iban Mayo en el 2000.

A pesar de que en los últimos años la competencia con los filiales de la Fundación Euskadi, Caja Rural y Kern Pharma le ha disminuido el número de los que daban el salto, todos los equipos profesionales con licencia en la Española van a tener en 2024 corredores ascendidos desde Baqué con Jon Barrenetxea, Álex Aranburu y Javier Romo (Movistar), Julen Amezqueta y Joan Albert Riera (Arabay-Illes Balears), Antonio Angulo y Ángel Fuentes (Burgos), Jon Agirre (Kern Pharma), Txomin Juaristi (Euskaltel) y Gorka Sorarrain, el último en pasar este año al Caja Rural tras ser quinto en el campeonato de España con Sicasal.