El Athletic despidió el año en San Mamés con otro triunfo y, a falta de una jornada para acabar la primera vuelta, alcanza los 35 puntos. Los mismos que tiene el Atlético con un partido menos. El dominio en la segunda mitad se plasmó en el gol sobre la bocina de Unai Gómez. El portero Álvaro Vallés se había erigido hasta entonces en el protagonista del partido tras sacar todos los remates con peligro. Incluso, había detenido un penalti.

Sin la emotividad de los festejos por el 125 aniversario, la alegría volvió a desbordar las gradas. El Athletic invitó al palco a Aitor Torres, capitán del Rubí, primer rival en Copa de este curso y confeso seguidor rojiblanco. Asimismo, en los prolegómenos se recordó a Aitor Zabaleta frente a la plaza Kirruli y protestaron por la actuación de la Ertzaintza del sábado en el mismo lugar en el que hirieron de muerte a Iñigo Cabacas.

Valverde repitió el once que pasó por encima del Atlético, con Beñat Prados y Herrera en el medio campo. Sin embargo, Las Palmas no se dejó intimidar y controló el juego a través de la posesión. Iniciaba las jugadas saliendo desde atrás con el portero Álvaro Vallés.

Al Athletic le costó generar ocasiones en la primera mitad y el equipo canario pudo adelantarse con un penalti. Paredes derribó en una carga a Marvin y el colegiado decretó la pena máxima. Después cambiaría la decisión tras la revisión en el VAR. Fue una pena no haber podido escuchar los audios.

Antes del descanso sí que vio penalti en un agarrón a Guruzeta en el área contraria, pero Vallés adivinó. En cambio, en la segunda mitad no quiso ver una mano clara de Las Palmas en un córner.

Aunque el resultado era idéntico que ante el Atlético, las sensaciones que transmitía el Athletic en la segunda mitad eran distintas. Por eso, Valverde no tardó en mover el banquillo y cambiar las posiciones de ataque. Williams se fue para el centro y Nico a la izquierda. Berenguer estuvo cerca de abrir al marcador nada más entrar, pero Vallés sacó su remate bajo la línea de gol. Por su parte, Sandro puso en aprietos a Unai Simón en la portería contraria.

El Athletic buscó el gol de la victoria con ahínco. Apretaba con un desencadenado Unai Gómez, lo intentaban los Williams, pero no llegaba el premio. Cuando parecía que el duelo iba a acabar en tablas, emergió la figura de Unai Gómez. El de Bermeo cogió un rechace al borde de área y de cabeza dejaba al Athletic en puntos de Champions.