Además del Athletic, la Real y Osasuna también se suman al Alavés -que ganó el sábado al Betis- en los octavos de final de Copa. Son los cuatro equipos vascos de Primera quienes estarán en el próximo sorteo -aún sin fecha por la suspensión del Unionistas-Villarreal-, un pleno que completó la Real tras derrotar al Málaga con un gol en propia puerta del gasteiztarra Einar Galilea nada más regresar de los vestuarios.

Imanol Alguacil no quiso especular nada y sacó su mejor once, con Odriozola y Zakharian cubriendo el hueco de Traoré y Take Kubo.

La superioridad en el juego de los txuri-urdin se trasladó enseguida al marcador con un cabezazo de Merino que Einar Galilea no acertó a despejar. Pellicer realizó un triple cambio para equilibrar el partido, pero la Real estuvo a punto de sentenciar por mediación de Turrientes -que entró en la segunda mitad- y Oyarzabal.

Osasuna, por su parte, necesitó de la prórroga para eliminar a un equipo de menor nivel como el Castellón. Será un buen balón de oxígeno de cara a la disputa de la Supercopa. Los de Jagoba Arrasate dominaron el encuentro disputado en Castàlia, pero estuvieron negados de cara a puerta. Raúl García de Haro protagonizó la mayoría de las ocasiones -se topó con el larguero en la primera mitad- y en la segunda, el Castellón tuvo más presencia en él área, hasta gozó de una clara ocasión.

Cumplidos los 90 minutos reglamentarios, ninguno de los dos equipos encontró el camino al gol y el duelo se marchó a la prórroga, con un Osasuna volcado sobre la meta castellonense. Primero, Peña se topó con Schwake, para que después, de disparo cruzado, Arnaiz abriera el marcador en el minuto 107. Una renta mínima que los rojillos tuvieron que defender con sufrimiento para conseguir el pase a octavos.

FÚTBOL DE ANTAÑO EN URRITXE

El Amorebieta, por su parte, compitió de tú a tú contra un equipo de Primera como el Celta, que llegaba a Urritxe con la vitola de favorito. Fue un duelo de poder a poder y en el que los dos llegaron a remontar. Los azules voltearon el gol inicial de Miguel Rodríguez para marcharse con ventaja al descanso (2-1), pero nada más reanudar el partido, el Celta doblegó al equipo local y Douvikas, con un doblete, puso tierra de por medio (2-4).