Flojo partido del Athletic en Almería. Un empate sin goles en casa del colista que deja un mal sabor al haber jugado contra diez casi toda la segunda mitad. La falta de frescursa en ataque volvió a pasar factura al equipo de Valverde. Ese desgaste emocional que suponen las eliminatorias de Copa.

Tercer partido fuera de casa consecutivo en el que los rojiblancos se quedan sin marcar. El punto sabe a poco al desperdiciar la oportunidad de asaltar las posiciones de Champions League, aunque no se puede obviar que permite al Athletic mantenerse en puestos europeos con holgura.

CAMBIOS

El Athletic entraba bien al partido marcando el territorio con un disparo de Mikel Vesga. Álex Berenguer también se dejaba ver en los primeros compases. Valverde apostó por refrescar el once introduciendo varias novedades. La más destacada fue la presencia de Unai Gómez en la media punta en lugar de Sancet. A su vez, Villalibre disfrutó de su primera titularidad en Liga por la lesión de Guruzeta y Yeray cubrió la ausencia de Vivian en defensa.

El arreón de los rojiblancos no se prolongó demasiado y el Almería de Gaizka Garitano no tardó en encontrar el camino hacia la portería de Unai Simón. El Athletic no estuvo fino y pasó algunos apuros, pero consiguió salir indemne.

Superada esa fase, el Athletic volvió a controlar el juego y estuvo cerca de adelantarse en el marcador. Primero, con un remate con la derecha de Villalibre, y después, con un cabezazo de Paredes en un córner. Fue la ocasión más clara del primer tiempo, aunque Maximiano respondió con un paradón. En el otro área, ‘El Choco’ Lozano dispuso de otra buena oportunidad justo antes del descanso.

El Athletic necesitaba algo más en ataque para aspirar a llevarse el triunfo y Ernesto Valverde sacó en el inicio de la segunda mitad a Raúl García, que alcanzaba los 600 partidos en Liga, y Muniain. El capitán no entraba con buen pie y cometía un error en el saque de una falta que propiciaba una contra peligrosa. Ramazani no estuvo acertado en la conducción y en la siguiente jugada dejaba a su equipo con uno menos al ver la segunda tarjeta amarilla.

En superioridad numérica y ante el colista, el equipo rojiblanco se fue a por el partido. El mensaje desde el banquillo también fue claro al meter seguido a Sancet y Herrera y después a Adu Ares. Sin embargo, los minutos iban pasando y no llegaba el gol. Tampoco las ocasiones. El Almería resistía bien plantado a un Athletic sin ideas en ataque.

La tuvo Raúl García en el minuto 86 con un cabezazo a centro de Herrera que se fue contra el poste, pero también pudo marcar el gol de la victoria el Almería en una contra en la siguiente acción.