Mariona BORRULL
Crítica cinematográfica
FESTIVAL DE CINE DE BERLÍN

Lo nuevo de A24: El hombre elefante y el debut de Annie Baker

Elenco de «A diferent man», durante la sesión de fotos.
Elenco de «A diferent man», durante la sesión de fotos. (Ronny HARTMANN | AFP)

La 74ª edición de la Berlinale no olvida el buen cine y hoy se entrega a las manos de A24, con los estrenos de ‘‘Janet Planet’’, precioso debut de la Pulitzer Annie Baker, y ‘‘A Different Man’’, un thriller resultón sobre qué nos vuelve atractivos ante las demás.

Christine Vachon es la productora de los grandes hitos del indie estadounidense, empezando por todo el cine de Todd Haynes (incluida la tremenda ‘‘Secretos de un escándalo’’) y coronándose hace meses con ‘‘Vidas pasadas’’. Pero desde los noventa Vachon no ha perdido ni un ápice de garra, que luce con la enésima relectura de ‘‘El hombre elefante’’. ‘‘A Different Man’’, en Competición, mira al repertorio de freaks marginados de Todd Browning, de ‘‘La parada de los monstruos’’ a ‘‘Drácula’’, con las mismas cucharadas de empatía que de crítica, acidísima.

Es la tercera película de Aaron Schimberg, donde Sebastian Stan interpreta a un hombre con deformidades en el rostro que, tras curarse y emprender una nueva vida, descubre que no era su fealdad lo que le impedía relacionarse con el mundo, y muy especialmente con su simpática vecina, Renate Reinsve (‘‘La peor persona del mundo’’). La película se sabe una desacomplejada tesis sobre el carisma y por ello se enzarza en sus propios meandros, sin embargo, lo más seguro es que -por estar pensada por y para la era gif- los meses que vienen la tengamos más que presente en los feeds de nuestras redes sociales.

«JANET PLANET» ES LA PRIMERA JOYA DE ANNIE BAKER (‘‘EL CINE’’)

La expectación venía de los festivales de Telluride y Nueva York, pero la platea respondió con la candidez de una criatura por Navidad al debut como directora -y guionista, naturalmente- de la dramaturga ganadora del Pulitzer y becada MacArthur. ‘Janet Planet’’ repasa la relación de apego de Lacy, de once años (una fantástica Zoe Ziegler), con su madre Janet (Julianne Nicholson, la recordarán como la madre de ‘‘Mare of Easttown’’), a través de las tres parejas que conviven con ellas durante un verano. Primero está Wayne (Will Patton), un red-neck, luego Regina (Sophie Okonedo), simpática pero negligente, y finalmente un gurú autodidacta llamado Avi (Elias Koteas).

‘‘Janet Planet’’ compila instantes de este tríptico con el preciosismo con el que, de pequeños, atesorábamos piedras en nuestros cuartos. La gran sorpresa, claro, venía de la capacidad de concentración en detalles mínimos con la que Baker encuadra sus viñetas, sobre todo en el papel distinguido que la cámara reserva a los primeros planos. Baker sabe cómo escribir unas vivencias que, quizás por el silencio imperante o por la fragilidad de los rayos del sol sobre el analógico, se sienten ya recuerdos… Sin olvidar por eso la lucidez en su examen de la fascinación y la réplica infantil. Una película a la que volver, tranquilas, con nuestras madres.

PATTI SMITH Y VOLODYMYR ZELENSKYJ, DE LA MANO EN LA NUEVA PELÍCULA DE FERRARA

«Cuando miles de personas han muerto y ha habido tanta violencia en Oriente Medio desde el 7 de octubre, ¿qué queremos que haga un festival de cine? ¿Qué queremos que sea?», planteaba la actriz Hadnet Tesfai al presentar la gala de anoche, marcada por las protestas multitudinarias a pie de alfombra roja y una retahíla de discursos que miraban de cara a todos los elefantes (políticos) en la habitación.

Horas más tarde, la prensa asistía al pase de la nueva película de Abel Ferrara, un manifiesto audiovisual hipertrófico en la línea de ‘‘Sportin’ Life’’ (aquella fue una de las reflexiones más clarividentes acerca de la crisis del coronavirus, filmada y presentada en Berlinale). De forma similar, ‘‘Turn In The Wound’’ (“Entrega la herida”) aglutina una miríada de voces más o menos alejadas de lugares clásicos de autoridad que aborden el conflicto en Ucrania: desde soldados en primera línea de combate hasta el propio presidente Zelenskyj, pasando por el testigo del propio cineasta y su esposa, de Moldavia. Entremedio, Patti Smith -han oído bien- canta las peroratas de Artaud, Daumal y Rimbaud acerca de la libertad y la opresión. Berlín sigue siendo epicentro del activismo.